MADRID.- Banco Popular elevó un 6 por ciento el beneficio neto a marzo gracias a una caída de las provisiones, en un contexto de estabilización de los ingresos y del crédito que le permitió mantener sus previsiones de márgenes de intereses para 2015.

El beneficio a marzo subió a 91,4 millones de euros, frente a previsiones de 75,4 millones de euros. La entidad explicó que la nueva metodología para calcular las aportaciones al Fondo de Garantía de Depósitos, que ahora se restan al final del ejercicio, llevó a la entidad a reexpresar las cuentas de 2014 y también distorsiona la comparativa en términos porcentuales.

En un entorno de tipos en mínimos en la eurozona, el margen de intereses subió un 2,4 por ciento a marzo a 562,2 millones, aunque fue inferior a los 569,9 millones estimados.

En comparación intertrimestral el margen de intereses ya cayó un 1,5 por ciento debido a que la creciente competencia de la banca por el negocio crediticio está presionando a la baja sus diferenciales y afectando a la rentabilidad de la banca. De hecho, Popular tan sólo elevó su rentabilidad sobre recursos propios al 2,86 por ciento desde 2,62 por ciento.

La presión sobre márgenes y rendimientos se produjo en un contexto de caída interanual de un 1 por ciento del crédito bruto total a clientela a marzo. No obstante, restando los adquisición temporal de activos (básicamente repos), la evolución crediticia ya empezó a mostrar un cambio de tendencia y subir un 0,5 por ciento respecto a finales de 2014.

El mercado ignoró este duro entorno que afronta la banca y valoró de forma positiva que el consejero delegado de la entidad, Francisco Gómez, se apoyara, durante la conferencia con analistas, en las previsiones de mejora de la evolución crediticia en 2015 para mantener las estimaciones de un margen de intereses de hasta 2.400 millones de euros en este año.

A pesar de que el margen bruto cayó en un 2,3 por ciento interanual a 927,7 millones de euros -- afectado por la venta reciente de más de la mitad de su negocio de tarjetas --, superó las estimaciones de 852,5 millones de euros, gracias a la fuerte contribución de 187 millones de euros de los resultados por operaciones financieras.

En el actual contexto de mejora económica, Goméz estimó además una reducción "significativa" de las provisiones en 2015 tras bajar a marzo un 6 por ciento interanual a 362 millones de euros en un contexto en el que la mora bajó al 13,32 desde el 13,78 por ciento anterior.

En tanto, la entidad terminó el primer trimestre con un ratio core Tier-1 totalmente anticipado del 10,54 por ciento desde el 10,38 por ciento de diciembre.

El banco afirma que estarán "atentos a las oportunidades que puedan surgir en los próximos meses" sobre posibles compras o fusiones

Respecto a posibles movimientos corporativos, el consejero delegado de la entidad manifestó que en el caso de España "estaremos atentos a las oportunidades que puedan surgir en los próximos meses, aunque a corto plazo no vemos que pueda haber ninguna operación".

Sobre oportunidades de crecimiento no orgánico en los mercados internacionales, reiteró el objetivo de la entidad de que de forma "prudente y a medio plazo" parte de sus ingresos a procedieran de economías no correlacionadas con la española.

"En este sentido, seguiremos estudiando aquellas posibles operaciones (...) enfocadas a los negocios de pymes y de consumo", manifestó.