La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, informó el lunes que la llegada de turistas en España tocó un nuevo récord en 2019, con 83,7 millones de visitantes, un1,2% superior a la registrada en 2018 que fue de 82,8 millones. Se trata del séptimo año consecutivo de récord de turistas en España, que ocupa el puesto de segundo destino turístico del mundo después de Francia.

El turismo es un pilar básico de la economía española, acaparando un 12,3% del producto interior bruto (PIB) del país.

Según Maroto, el gasto turístico del conjunto del año 2019 rozaría los 92.337 millones de euros, cifra un 2,9% superior a la de 2018, lo que supone también un nuevo récord histórico.

Maroto destacó especialmente el incremento este año desde mercados lejanos así como de Estados Unidos que han compensado en parte la caída de otros mercados tradicionales como Reino Unido y Alemania. "Tenemos que buscar nuevos perfiles de turistas con mayor poder adquisitivo", indicó la ministra asegurando que cada vez se busca más un turismo más experiencial y menos vacacional.

España ha vuelto a batir su récord de llegadas de turistas este año, a pesar de las incertidumbres producidas por la sentencia del procès en Cataluña o por la quiebra del turoperador Thomas Cook, que traía a nuestro país millones de viajeros, sobre todo ingleses.

Con este España acumula siete años consecutivos de récord de visitantes extranjeros. En opinión de Maroto los datos de 2019 demuestran la fortaleza del modelo turístico español ante la incertidumbre nacional e internacional a pesar del pesimismo instalado en algunos sectores. "Por ello desde el Gobierno se afronta el año 2020 con optimismo, porque tenemos un sector fuerte y consolidado, capaz de afrontar los desafíos que nos depare este año", explicó la ministra.

Además, el sector sigue siendo un motor de empleo, con 75.000 nuevos puestos creados este año y un total de 2,4 millones de afiliados, lo que supone el 12,4% del total de la economía nacional.

Previsiones para 2020

De cara al 2020, La diversificación de los destinos será uno de los objetivos, "para atraer pasajeros de otros mercados y no depender tanto de los mercados consolidados". El reto es poder desestacionalizar los flujos y que los pasajeros se repartan a lo largo del año.

Maroto insistió en la necesidad de un marco regulatorio para atender "fenómenos como el de las viviendas de uso turístico, definiendo un marco que garantice una competencia leal".

Durante el acto de este lunes la ministra ha avanzado parte de su agenda para Fitur, que comienza esta semana, y ha dicho que el objetivo del Gobierno en este foro internacional del sector "es fortalecer nuestro liderazgo y reforzar la diversificación de mercados". Otro objetivo es impulsar los mecanismos de gobernanza participativa promoviendo el trabajo en red y para ello mantendrá encuentros con los representantes de las comunidades autónomas y se convocará un nuevo encuentro del Consejo Español de Turismo (Conestur).

La ministra también anunció se está estudiando la posibilidad de que España albergue una cumbre mundial de turismo tras el éxito alcanzado con la COP 25, y que el Gobierno realizará una apuesta decidida por mejorar la intermodalidad ya que la conectividad es una de las fortalezas de nuestro turismo.

La ministra insistió en que, a pesar de lo que muchos creen, el mercado turístico español "no ha tocado techo" aunque reconocido que ahora se ha apuesto el foco en la calidad el modelo turístico. "Aún hay margen para crecer, podemos crecer mucho ofreciendo una gran variedad de productos turísticos", insistió añadiendo que la calidad es el sello diferencial de la oferta turística española.