Público
Público

'El maestro que prometió el mar', una historia real que llora por todos los maestros asesinados en la Guerra Civil

Patricia Font lleva al cine la historia real de Antoni Benaiges, maestro republicano asesinado por los falangistas al comienzo de la guerra. Mejor película española en el VI Festival Cine por Mujeres Madrid, los protagonistas son Enric Auquer y Laia Costa

Enric Auquer, en el papel del maestro Antoni Benaiges (Filmax) (1)

Begoña Piña

Julio de 1936. Una partida de falangista detuvo en la Casa del Pueblo de Briviesca al maestro Antoni Benaiges. Fue torturado toda la noche, le arrancaron todos los dientes, y al día siguiente le pasearon desnudo en un coche para que todo el pueblo le viera. Le asesinaron y lanzaron su cuerpo a una fosa en La Pedraja.

La exhumación de esta fosa hace más de diez años sacó a la luz su historia, que ahora, con El maestro que prometió el mar, llega al cine y que es, trágicamente, la historia de decenas de miles de maestros de la República. Los cines remediarán ahora el atropello provocado por el negacionismo de Vox y del PP, censores de la obra de teatro sobre Benaiges, el pasado julio en Briviesca.

https://www.youtube.com/watch?v=UkWExYIkrY8&ab_channel=Filmax

“El mar será muy grande, muy ancho y muy hondo”, escribieron los alumnos de Antoni Benaiges en Bañuelos (Burgos). Su maestro, un republicano militante de UGT, había llegado en 1934 destinado al pueblo para dar clases de primaria. Allí arrasó con el autoritarismo que había impuesto la iglesia en la escuela y abrió una espléndida puerta a la libertad, el conocimiento y la tolerancia con un sistema de enseñanza basado en el método de Celestin Freinet. El día que hablaron en clase del mar, al conocer que ninguna de las niñas y niños lo había visto nunca, les prometió llevarles a verlo. Los asesinos no le dejaron cumplir su promesa y mataron también la ilusión de aquellos niños.

Adaptación al cine del libro El maestro que prometió el mar, de Francesc Escribano, con guion de Albert Val, la película está dirigida por Patricia Font y en ella se narran en paralelo la historia real de Antoni Benaiges y la de una mujer, Ariadna, que busca en la fosa común de la Pedraja los restos de su bisabuelo. Enric Auquer, estupendo en su papel del maestro, encabeza el reparto de este trabajo, en el que le acompañan Laia Costa y Ramón Aguirre, entre otros.

De la luz a las sombras

“Este pueblo no tiene agua, no tiene luz, ni tiene caminos; para ir a Briviesca apenas si se inicia una carretera, y, sin embargo, no he pedido, no pido; aquí me quedo. Veo claro, claro cómo me voy haciendo luz en los cerebros de cada uno de estos chiquillos y chiquillas y me hago luz también en el pueblo…” escribió Benaiges a su amigo, el pedagogo anarquista Patricio Redondo.

La directora Patricia Font con el actor Enric Auquer, en el rodaje (Filmax)

Esa luz a la que entonces se refería el maestro está ahora en la pantalla, en imágenes luminosas con colores cálidos y “con mucho movimiento, rodamos cámara en mano, una cámara muy viva”, explica la directora, que para la parte del relato que se refiere a la actualidad apuesta por “colores más fríos, porque se trataba de un ambiente más frío, con muchos silencios, con gente que habla poco y que empieza viendo huesos, fosas comunes, muertos. Y la cámara es mucho más estática o con movimientos muy suaves”.

No son cosas del pasado

Dos mundos que en sí mismos revelan las heridas que han dejado aquellos asesinados por el franquismo en la España de hoy. “Con la película intentamos que la gente entienda que no son cosas del pasado, que son cosas que están en el presente, que nos tocan muy de cerca, que aún es una historia muy reciente que la tenemos nuestras casas”, dice Patricia Font, que añade: “Todos hemos heredado esas heridas en el sentido de que, aunque tengamos o no tengamos casos en casa, hemos oído historias de algo relacionado con la Guerra Civil, si no es un abuelo directo, es un tío, o no sé, incluso un padre”.

“Hoy en día creo que hemos heredado el que nuestros seres queridos, abuelos, bisabuelos, padres, hayan vivido hechos muy traumáticos y muy dolorosos. En algunas familias a lo mejor no es una herida profunda, pero yo creo que en muchas sí lo es y básicamente queríamos sobre todo tener mucho respeto al retratar las familias para las que sí lo son”, continúa la directora, que contó en el rodaje con especialistas que asesoraron al equipo, como Sergi Bernal o Juan Antonio Abella.

Además, la actriz Laia Costa, para su interpretación de la mujer que busca los restos de su bisabuelo, conversó con Miguel Ángel Martínez Movilla, presidente de la asociación de familiares de represaliados en la zona de La Pedraja. Allí se hallaron, en los trabajos de exhumación realizados entre 2010 y 2011, restos de 135 personas fusiladas. Hay todavía muchos no encontrados: se calcula que en el Monte de La Pedraja, en los primeros meses de la guerra, fueron asesinadas unas 300 personas.

Cunetas y fosas comunes

“Creo que a través de la película las intenciones están claras, lo que pensamos todos los que estamos involucrados en el proyecto, sobre todo en cuanto a lo que es la memoria histórica. No solo es importante recuperar la historia de Antoni Benaiges, que creemos que lo merece, sino todo lo que representa, todos esos maestros republicanos con el mismo final que él y toda esa gente que aún está en cunetas y en fosas comunes. Mi opinión es que mientras siga habiendo esto, las heridas no estarán cerradas”.

Secuencia de rodaje en la fosa común (Filmax)

“Es un gran honor poder explicar una historia así”, concluye la cineasta Patricia Font, que el 9 de noviembre llevará por fin esta historia, tras la censura del alcalde del PP del pasado verano, a Briviesca. “Las proyecciones que hemos hecho han sido muy emotivas, la gente se ha emocionado mucho y han provocado preguntas e incluso comentarios muy bonitos. A mí, por ejemplo, me han agradecido el haber hecho la peli y esto no es algo que me hubiera pasado antes. Es lo mejor que te pueden decir”.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?