Los vecinos de Alcobendas (117.000 habitantes) llevan ocho años luchando para que no se destruya Los Carriles, el último espacio natural protegido de ese municipio madrileño. La construcción de un nuevo barrio, denominado Valgrande, supondría arrasar con una zona de 220 hectáreas donde habita una significativa biodiversidad. 

La plataforma ciudadana Salvemos Los Carriles califica de "atentado ecológico" el complejo urbanístico de más de 8.000 viviendas que quiere llevar adelante el Ayuntamiento de Alcobendas. Según los vecinos de esta localidad, esta acción perjudica gravemente el municipio, puesto que Los Carriles suponen un gran sumidero de contaminación y un "escudo climático". 

Esther Ortega, portavoz de la plataforma vecinal, explica a Público que Los Carriles es una joven dehesa con encinas centenarias y un valor ecológico muy importante. "Para que una encina crezca y sea un ejemplar maduro hacen falta años, y se las quieren cargar", manifiesta. Ortega subraya que el entorno natural alberga numerosas mariposas. "Las mariposas son un índice de riqueza de terreno y de biodiversidad. En Los Carriles hay más mariposas que en todo Reino Unido entero"

Además, la plataforma de vecinos asegura que el plan urbanístico representa una presión extra para el Monte de Valdelatas, que es clave en su conexión con el Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares y la Zona de Especial Protección para las Aves del Monte del Pardo. El plan urbanístico fue lanzado por el gobierno del PP gracias a dos votos de apoyo de Ciudadanos.

Los Carriles se localiza al oeste del municipio, entre el monte protegido Valdelatas, en el límite con el municipio de Madrid y el casco urbano de Alcobendas. El espacio natural ocupa una extensión de 2.173.190 metros cuadrados, una superficie similar a dos veces el parque de El Retiro de Madrid.

Agilizar los trámites de Valgrande

El pasado mes de octubre el Tribunal Superior de Justicia de Madrid estimó parcialmente un recurso contencioso-administrativo interpuesto por Ecologistas en Acción donde emitía una sentencia anulando la operación urbanística. Sin embargo, la plataforma asegura que la sentencia no es firme y Los Carriles sigue en peligro.

La alcaldesa de Alcobendas, Rocío García Alcántara, se reunió a principios de noviembre con el consejero madrileño de Medio Ambiente, Agricultura e Interior, Carlos Novillo, para agilizar los trámites del Parque Forestal de Fuente Lucha y el Plan Parcial de Valgrande.

La portavoz de la plataforma vecinal subraya que la ley nacional que estipula que cualquier espacio verde no protegido es urbanizable. "Esto es una barbaridad porque estamos en un punto de no retorno en cuanto a emergencia climática y no podemos permitir leyes así", lamenta Esther Ortega. "Arrasar 220 hectáreas maduras con gran biodiversidad, atenta contra la Agenda 2030 y contra cualquier acuerdo de cualquier cumbre climática".

La Comunidad de Madrid ha mostrado su apoyo al proyecto urbanístico del Ayuntamiento de Alcobendas. Ambas instituciones han asegurado que se informarán de todos los avances que se vayan produciendo.

No se puede construir cerca de torres de alta tensión

"De todo lo que Ecologistas en acción denunciaba, el juez solo vio un problema en las torres de alta tensión que cruzan la zona de Los Carriles", explican desde la plataforma de vecinos. Salvemos Los Carriles informa que el juez dictaminó que no se podía construir cerca de estas torres. "Para parar el proyecto habría que haber pagado las medidas cautelares. Como no tenemos dinero, no se ha podido parar. Ahora se puede construir, pero no cerca de las torres", afirma la portavoz.

El Ayuntamiento de Alcobendas y los particulares han propuesto construir un muro de 25 metros de alto por toda la longitud de las torres. Actualmente, el juez está pendiente de valorar la validez de este recurso o seguir con la decisión de no poder construir cerca de las torres.

"Por un lado, nos hablan de la sostenibilidad y, por otro, se quieren cargar el último espacio verde con 26.000 personas más, 20.000 coches, y un objetivo de huella cero de carbono. Es tan incompatible que no tiene sentido. Es un ecocidio", insiste la portavoz de la plataforma de vecinos.