Decenas de millones de dosis de la vacuna de AstraZeneca contra la covid-19 se mantienen inactivas en EEUU a la espera de a la espera de los resultados de su ensayo clínico, mientras varios países que tienen autorizado el uso de la vacuna de la empresa anglosueca han pedido acceso a este suministro. 

Así lo reporta el diario estadounidense The New Times, que apunta que estos millones de dosis sin utilizar podrían acelerar la vacunación en todo el mundo, sobre todo después del frenazo en la administración de la vacuna de AstraZeneca. Un parón que retrasó considerablemente el ritmo de inmunización contra el coronavirus en Europa.

Este excedente ha provocado que se lleguen a plantear en Washington su envío al extranjero, aunque algunos funcionarios federales no están dispuestos a renunciar a ellas.

"Se informa que otros gobiernos se han dirigido al Gobierno de los Estados Unidos con respecto a las donaciones de dosis de AstraZeneca. Le hemos pedido que examine cuidadosamente estas solicitudes", apunta Gonzalo Viña, un portavoz de AstraZeneca y recoge el NYT. 

Aunque la vacuna de AstraZeneca ya está autorizada en más de 70 países, según un portavoz de la empresa, su ensayo clínico en Estados Unidos aún no ha presentado resultados, y la empresa no ha solicitado a la Administración de Alimentos y Medicamentos una autorización de uso de emergencia.

La compañía ha pedido al gobierno de Joe Biden que le permita prestar dosis estadounidenses a la Unión Europea, donde no ha cumplido sus compromisos de suministro originales. 

De momento, la Administración Biden ha optado por mantener la estrategia de America First  y continuar con el objetivo de vacunar a los estadounidenses primero. 

Según el mismo medio, la reticencia del gobierno está relacionada con las incertidumbres sobre el cumplimiento de suministro de vacunas establecido por el presidente Biden antes de finales de mayo, cuando prometió que habría suficientes dosis de vacunas para cubrir a todos los adultos del país.