El portal de transparencia arroja un dato inquietante. Casi 750.000 madrileños se ven obligados a esperar hasta seis meses para que les operen, para someterse a una prueba diagnóstica o para que un médico les atienda en una primera consulta. Un dato que evidencia hasta qué punto la sanidad madrileña está mermada con una escasez de recursos humanos y materiales que revierte en los ciudadanos.​

Se trata de una cifra sin precedentes –desde que existen registros oficiales– que parece no preocupar en exceso al Gobierno de la Comunidad de Madrid, no en vano Sanidad es la partida que menos sube en los Presupuestos de Ayuso.
Hablamos de una situación que, desde Comisiones Obreras, se ha tildado de "herida social" que está provocando un daño irreparable a la salud del pueblo madrileño.

"Insistimos a la Consejería de Sanidad a que sea responsable con la salud de los madrileños y active de inmediato un plan para acabar con las ingentes listas de espera en los centros sanitarios públicos de la región. Desde enero de 2021, una vez pasado lo peor de la pandemia las listas de espera han aumentado un 35,76%", ha esgrimido Mariano Martín-Maestro, secretario general de CCOO Sanidad de Madrid.

Si a principios de año el número de madrileños que estaba en listas de espera era de 552.152, en el mes de septiembre se acumulaban ya otros 197.459 ciudadanos. Serían, por tanto, cerca de 750.000 las personas que aguardan. Una situación insostenible que contrasta con la decisión de Ayuso de despedir a más de la mitad de los "refuerzos covid".

Desde CCOO Sanidad Madrid lamentan la situación a la que se ha relegado al personal sanitario madrileño y exigen a la Consejería que mantenga los 11.000 contratos de refuerzo covid, y no cancele el 50% que tiene previsto rescindir el próximo 31 de diciembre.