La pandemia ha resultado ser un punto de inflexión para muchos matrimonios. Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) muestran que los divorcios crecieron en casi un 13% en 2021, y así lo indica su Estadística de Nulidades, Separaciones y Divorcios. En el año 2021 se produjeron 86.851 divorcios (el 95,9% del total), que aumentaron en un 12,5% respecto a 2020. Ceuta es el territorio donde se registra la mayor tasa por cada mil habitantes, mientras que Castilla León registra la menor.

Por otro lado, se produjeron 3.674 separaciones (4,1%) y 57 nulidades (0,1%), aumentando un 32,4% y un 42,5%, respectivamente. El divorcio, en todo caso, es de los procesos más rápidos, habiendo casi un 75% de rupturas que se consumen antes de los seis meses. El divorcio entre parejas del mismo sexo en 2021 representan únicamente el 1,9%, y de éstos, 900 fueron de hombres y 772 de mujeres. Hubo, además, 68 separaciones que también representan el 1,9%. 

Las encuestas del INE revelan que la edad media de las parejas de distinto sexo que deciden terminar la relación entre los 40 y 49 años (en hombres, fue de 48 años de media; en mujeres, fue de 45,6 años), durando estas relaciones una media de 16,5 años, una cifra algo inferior si la comparamos con el año 2020. Los divorcios, que duran de media unos 16,3 años, marcan diferencia con las separaciones, con unos 20,6 años de duración media. Las nulidades suelen durar de media menos años, unos 14,8. 

Asimismo, se remarca que, al rededor del 70% de las veces, las demandas de separaciones y divorcios son presentadas por las dos partes: el 78,8% de los divorcios fueron de mutuo acuerdo frente al 21,2% que fueron de carácter contencioso; en las separaciones, el porcentaje aumenta hasta el 88% cuando se habla de mutuo acuerdo y disminuye al 12,1% para las contenciosas.

En el 80,4% de los divorcios de diferentes sexos, la ruptura se producía en parejas en las que ambas tenían la nacionalidad española, frente al 11,9% en el que uno tendría nacionalidad extranjera y al 7,7% en el que ambos eran extranjeros. En el 43,2% de estas rupturas matrimoniales, no había hijos menores o dependientes económicamente de por medio; en el 45,2%, había hijos menores de edad; en el 4,2%, había hijos mayores de edad dependientes económicamente; y sólo en el 7,4% había hijos menores de edad y mayores dependientes económicamente. 

La custodia, cuando había hijos menores, fue otorgada a las madres en el 53,1% de los casos; a los padres, en el 3,5%; y en el 43,1% fue compartida. En el 0,3% de los casos se recurrieron a otras instituciones y familiares. En el caso de las parejas del mismo sexo, sólo se adoptaron medidas de custodia de hijos menores en casi el 19% de los casos. En el 35,8% de los casos la custodia se dio a uno de los dos cónyuges, mientras que en el 62,4% fue compartida.

Cuando había una pensión alimenticia (en el 57,5% de los divorcios y separaciones) de por medio, el 60,2% correspondía al padre frente al 3,7% a la madre y al 36,1% a ambos cónyuges. La pensión compensatoria (en el 8,6% de los casos de divorcios y separaciones) fue fijada para pago para el marido.