Los tres adultos, que fueron detenidos por su presunta implicación en la brutal paliza a un joven en la localidad vizcaína de Amorebieta, han comparecido en la mañana de este viernes en el juzgado de Durango. 

Allí el juez ha decidido el ingreso en prisión provisional y sin fianza para dos de ellos, que no han declarado, según ha señalado a los periodistas Juan Erostarbe, abogado de uno de los arrestados. 

El tercero sí ha testificado y "ha colaborado", según ha indicado el letrado. Conforme a su declaración no habría participado en la agresión, según ha señalado otro de los abogados. Por dicho motivo ha quedado en libertad, pero debe presentarse una vez al mes en el juzgado. 

La agresión en grupo se produjo en la madrugada del pasado domingo 25 de julio y la víctima, de 23 años, permanece ingresada en estado muy grave. "De momento, ni a mejor ni a peor. Los médicos nos trasladan precaución. No ha empeorado y el lunes nos dirán más cosas", ha afirmado Alexandra Buric, en representación de la familia.

También ha apuntado que el joven padece numerosos "coágulos de sangre en la cabeza", pero los médicos "confían en que pueda salir adelante, porque es un chico joven".

Además, los médicos esperan poder realizarle una resonancia magnética en las próximas horas para conocer la evolución del daño que padece. 

Por este delito, la Ertzaintza ha detenido a un total de ocho varones de entre 15 y 38 años, a quienes incluye en una banda juvenil violenta. De todos ellos, cinco son menores y ya han sido presentados en la Fiscalía. 

El joven agredido en Amorebieta está estable dentro de la gravedad

El joven de 23 años permanece "estable" dentro de la gravedad en el hospital de Cruces, en espera de que se le practique una resonancia magnética.

Así lo ha señalado a los medios de comunicación a las puertas del hospital una portavoz de la familia en presencia del padre del joven agredido.

Los médicos, según ha indicado, han explicado a la familia que "desde hace dos días, que fue la segunda vez que le operaron, no hay ningún cambio, sigue estable".

Esperan, según ha dicho, poder practicar este fin de semana una resonancia magnética al joven, que "tiene un montón de coágulos de sangre", ha indicado la portavoz, que ha señalado que "están muy reservados" porque "la situación es muy delicada". 

Según ha afirmado, "lo que más ánimo les da" es que "siendo un chico joven igual sale adelante y esperemos que sí, que se recupere", ha deseado.

La portavoz también se ha referido a la situación del padre de la víctima: "No duerme, no come, no tiene ganas de nada".

"Hasta que no le dé una buena noticia, que esperemos que sea pronto, no tiene vida", ha sostenido.