Una persona ha muerto y al menos otras cinco han resultado heridas de cierta gravedad debido al descarrilamiento de un tren de cercanías a las 06.15 horas de esta mañana en la localidad Vacarisses (Barcelona), en la línea R4 que cubría el trayecto entre Manresa y Sant Vicenç de Calders. En ese momento el convoy circulaba entre las estaciones de Vacarisses y Vacarisses Torreblanca. Hay además, otros 44 heridos leves y 86 personas que han resultado ilesas.

El accidente se ha producido en la línea R4 en la localidad de Vacarisses, a altura de la C-58, en el kilómetro 32, entre Can Serra y el Polígono Can Torrella, cuando los cuatro primeros vagones de los seis que formaban el tren han descarrilado por  un desprendimiento de tierras y rocas de un talud poco antes que pasara el convoy. La malla que cubría el talud entre el que discurre la vía no aguantó tras las fuertes lluvias caídas en los últimos días y no pudo contener el desprendimiento de rocas.

Según Protección Civil, 86 viajeros han resultado ilesas y han sido trasladadas a la estación de Terrassa y al pabellón polideportivo de Vacarisses, donde se encuentra un equipo de psicólogos para atender a los afectados y a sus familias.

El cuerpo de la persona fallecida fue hallado bajo rocas y fuera del tren, según ha avanzado la cadena SER. Se está intentando determinar su identidad.

Los heridos de cierta gravedad han sido trasladados por el Sistema de Emergencias Médicas (Sem) a diferentes centros hospitalarios: dos a la Mútua de Terrassa, dos al Parc Taulí de Sabadell y uno a la Fundació Althaia. Además, una decena de heridos leves han sido evacuados a los hospitales Parc Taulí de Sabadell, Mútua de Terrassa y a los ambulatorios de urgencias de Manresa, Sant Félix.

Los bomberos de la Generalitat han confirmado que a las 08.10 horas ya no quedaba ningún herido atrapado en el interior del tren. 

A consecuencia del accidente, se ha cortado en ambos sentidos de circulación la autopista C-58 en Vacarisses para facilitar el trabajo de los servicios de emergencia.

Tráfico está desviando la circulación hacia la autopista C-16, que ha levantado los peajes en ese punto, y ha informado de que hay retenciones en la C-55, los Túneles de Vallvidrera y en la C-58, de entrada y salida de Barcelona.

El presidente de la Generalitat, Quim Torra, y el conseller de Interior, Miquel Buch, han acudido al lugar del accidente.

Hasta el lugar del accidente se desplazaron un total de 14 dotaciones de los Bomberos de la Generalitat, ocho ambulancias del Sistema de Emergencias Médicas (Sem) y siete dotaciones de los Mossos d’Esquadra para rescatar a los heridos y la evacuación de los pasajeros a hospitales cercanos. 

Protección Civil y Renfe han puesto dos teléfonos de información a disposición de los familiares de los pasajeros: el de Rodalies de Catalunya (900.41.00.41) y el teléfono gratuito de Emergencias (900 400 012). 

Fomento anuncia una investigación

El ministro de Fomento, José Luis Ábalos, ha asegurado que su departamento y Renfe investigarán las causas del accidente.

En una entrevista en la Cadena Ser, Ábalos ha señalado que el accidente se ha producido en una zona enmallada que no ha resistido el desprendimiento de rocas, pero ha dicho desconocer si el desprendimiento ha ocurrido antes de que pasara el convoy o mientras pasaba.

Y esa es la gran polémica, porque varios maquinistas han denunciado a La Sexta el mal estado de la vía en el tramo donde se ha producido el accidente. En Twitter incluso circula un vídeo tomado el pasado 16 de noviembre en el que ya se puede apreciar cómo se desprenden piedras y rocas por las fuertes lluvias y pese a la malla.