El expresidente de Banesto Mario Conde pasará previsiblemente hoy su última noche en prisión después de que su defensa haya presentado esta tarde en la Audiencia Nacional una garantía hipotecaria como aval de la fianza de 300.000 euros impuesta por el juez Santiago Pedraz.

A estas horas, el instructor de la 'operación Fénix', que investiga al exbanquero y su entorno por el presunto blanqueo de 13,06 millones de los casos Banesto y Argentia Trust, ya estaría valorando si dicha garantía cubre el importe de la fianza, aunque según han informado fuentes jurídicas, el resultado de tal comprobación no se conocerá hasta mañana.

De ser suficiente, se abrirán para Conde las puertas de la cárcel madrileña de Soto del Real, donde ingresó hace dos meses, después de que el magistrado haya acordado esta mañana revocar la prisión incondicional al no existir riesgo ni de fuga ni de obstaculización a la justicia.

Tales argumentos fueron empleados por el propio juez en el auto por el que también decretó la entrada entre rejas del abogado Francisco Javier de la Vega, mientras que para la hija de Conde y presunta coartífice de la trama, Alejandra, imponía arresto domiciliario por circunstancias familiares.

Ahora Pedraz, como ya avanzó en su escrito del pasado 13 de abril, reconsidera la situación personal del exbanquero en una investigación avanzada sobre la que ya no pesa el secreto de sumario, y le obliga a comparecer semanalmente ante la Audiencia Nacional u otro tribunal que conozca la causa.

Ni la presión de la fiscal Elena Lorente, que se oponía a dejar en libertad a los encarcelados en esta causa, ha impedido al juez imponer un criterio con el que modifica el fallo de la sección tercera de la sala de lo Penal que, el pasado 13 de mayo, rechazó el recurso de la defensa al percibir un riesgo "razonado" de fuga dada la "alta disponibilidad económica" del exbanquero.

"Teniendo en cuenta que se han practicado aquellas diligencias urgentes para asegurar el curso de la instrucción, (ésta) no habría de verse perjudicada", expone en esta ocasión Pedraz y añade que se adoptarán nuevas "medidas de control" para garantizar su evolución.

Conde deberá facilitar un teléfono móvil para estar localizable las 24 horas, tampoco podrá abandonar España, cuestión por la que el instructor ha acordado la retirada de su pasaporte.

Unas medidas cautelares que ya cumplen otros implicados como el hijo del jurista, Mario; su yerno, Fernando Guasch, o los empleados de la familia, y que toman especial peso en un caso en el que los investigados -antes imputados- formarían parte de una "organización criminal transnacional" con nexos en varios países.

A todos ellos se les atribuye, además de blanqueo y pertenencia a grupo criminal, alzamiento de bienes y ocho delitos fiscales.

Tales indicios vienen refrendados por el oficio contenido en el sumario al que ha tenido acceso Efe y en el que la Guardia Civil infiere que Conde mantiene en la actualidad "fondos opacos" fuera de España a partir de las pesquisas efectuadas durante el registro en la propiedad familiar, donde incautaron 40.400 euros en efectivo.

En caso de que el aval depositado finalmente reciba el visto bueno de la Audiencia Nacional, quedará por saber qué futuro inmediato le depara a la primogénita del empresario, pendiente de conocer si el juez Pedraz decide revocar su situación de arresto al igual que ya ha hecho con su padre y uno de sus hombres de confianza.