A primera hora de la mañana en torno a 300 activistas cortaban el puente del Paseo de la Castellana a la altura de Nuevos Ministerios, en Madrid. Los resultados de la movilización han sido el corte de la circulación tres horas, otros tres detenidos -que ya se encuentran en libertad-, decenas de identificaciones y retenciones, así como una gran cantidad de activistas con roturas de hueso, luxaciones y magulladuras.

Esta acción daba comienzo a la jornada de protestas organizada desde ‘2020: Rebelión por el clima’ (by2020) que ha culminado en una acampada indefinida frente al Ministerio para la Transición Ecológica. Elisa, una de las participantes en la acción, ha confirmado a Público que un millar de personas están participando en la movilización que tiene lugar en diferentes lugares a nivel mundial.

La actuación policial en el corte del puente de Nuevos Ministerios, a donde se han desplazado hasta seis furgones antidisturbios del Cuerpo Nacional de Policía, ha sido “desmedido”, según tildan desde by2020. En este sentido, la gran mayoría de las personas que estaban participando en la sentada han sido identificadas. En cuanto a los heridos, la cifra final estará entre los 20 y 30, tal y como adelantaba Serlinda, una de las activistas que ha participado en la acción desde el principio.

Fuerte actuación por parte de la Policía

“Después de que la policía echara del lugar a los periodistas que estaban en la zona los agentes han empezado a sacarnos con mucha violencia”. Así se pronunciaba un activista que prefiere guardar el anonimato por posibles represalias legales. Las primeras informaciones de by2020 recogen que hay “tres muñecas rotas y bastantes dislocaciones y luxaciones; además de que —continúa el activista— una chica se haya desmayado del dolor que le han provocado”.

Instantes después decenas de activistas han sido llevados a diferentes comisarías, donde se encuentran retenidos sin que by2020 pueda aportar más información. Los tres detenidos por resistencia y desobediencia a la autoridad -que ya se encuentran en libertad-, entre los que destaca Jorge Riechman, profesor universitario, filósofo y activista ecologista. Esta cifra aún no es definitiva, ya que, aunque desde la Jefatura del Estado afirman que son tres las detenciones, a by2020 le consta una más.

Acampada frente al Ministerio

En paralelo y tan solo a unos metros de distancia, centenas de ecologistas de by2020 ocupaban los jardines frente al Ministerio para la Transición Ecológica. Esta acción que se presupone de mayor recorrido que el corte de la carretera ha hecho que hasta 10 furgones de la Policía Nacional se desplazaran al lugar, acompañados de otros dos de la Policía Municipal de Madrid.

En la acampada predomina un ambiente tanto reivindicativo como festivo. Aquí, algunos activistas cantan en círculo. | Foto: G. M. M.

Elisa se pronuncia respecto a la duración de la acampada: “Estaremos aquí hasta que el Gobierno acepte nuestras exigencias”. En el documento que han publicado desde by2020 resumen sus demandas en cinco puntos: la declaración de la emergencia climática, que el Gobierno se apoye en la ciencia para que diga que "el actual modelo económico agrava la crisis climática", una actuación inmediata, democracia real en la que participen todos los actores implicados y justicia climática para que no sufran las consecuencias aquellas regiones del mundo que, a su vez, son las que menos culpabilidad tienen de la actual situación.

De hecho, desde by2020 consideran que la situación es tan extrema que el poder político debe actuar de inmediato, sin esperar a “una enésima reunión que acabe con muy buenas palabras pero ninguna actuación al respecto”, denunciaba una ecologista de la plataforma.

Acciones a nivel mundial

El 7 de octubre estaba marcado como el día de la desobediencia civil por parte de by2020 a nivel mundial, no solo en Madrid. Por ello, otras acciones directas no violentas se han sucedido por importantes enclaves, como Berlín y Ámsterdam. La ciudad alemana ha amanecido con una de sus avenidas más importantes cortada por los ecologistas. Del mismo modo, en la capital de los Países Bajos cientos de activistas medioambientales bloquearon el centro durante unos minutos antes de que la policía actuara contra ellos.