La evolución de la pandemia parece que se estabiliza en buena parte de España, aunque en algunas comunidades sigue al alza, como en Euskadi, donde la tasa de contagios ha vuelto a subir por encima del 7 % y se han registrado 585 positivos, y en Aragón, en la que se han notificado 208 nuevos casos.

Esta es la tendencia que se vislumbra este domingo, en el que las restricciones de la covid-19 han marcado el Dos de Mayo, fiesta en la comunidad de Madrid, que ha registrado un descenso en los fallecidos por coronavirus en los hospitales en las ultimas horas.

Han fallecido trece personas (veinte perdieron la vida el día anterior), los nuevos contagiados han sido 748 (2.210 se conocieron el sábado), aunque ha aumentado ligeramente la presión hospitalaria.

Los nuevos casos han disminuido también en Castilla y León, que ha comunicado este domingo 166, la mitad que los anotados ayer (333), aunque de nuevo han aumentado los decesos, cinco hoy, tres más que los que se registraron el sábado.

Los últimos datos de Navarra apuntan también a un evidente descenso en la tendencia de nuevas infecciones, con 106 y una tasa de positividad del 5,7 %, si bien ha registrado un nuevo fallecimiento, el de un hombre de 52 años.

El descenso de casos también ha llegado a Cantabria, 74, 38 menos que el día anterior, y ha bajado ligeramente la incidencia, pero han subido los hospitalizados y se ha mantenido el mismo número de pacientes en la UCI.

En Canarias también han descendido los contagios: la Consejería de Sanidad ha registrado en las últimas 24 horas 117, catorce menos que en el anterior recuento, y ninguna muerte.

Un fallecimiento ha registrado Extremadura en las últimas horas, el de una mujer de 84 años de Don Benito, después de dos días sin decesos, en una jornada en la que han bajado los contagios (64), los ingresos (62) y la incidencia acumulada.

Sin embargo en esta comunidad también se ha detectado un caso de infección por la variante india, una persona que llegó de otra comunidad autónoma entre los días 19 y 20 de abril, pero que desde entonces ha permaneciendo aislada en el domicilio familiar en todo momento, según ha informado el Ejecutivo regional.

En Galicia también han caído los contagios (se han contabilizado 174, 17 menos que el día anterior) y se ha logrado contener la presión hospitalaria en planta y en las unidades de críticos.

Hasta las 18.00 horas del sábado había en las unidades de críticos había 51 pacientes, uno más que un día antes y casi el doble que hace dos semanas, y en las camas convencionales están ingresados 163 pacientes, tres más que en el último recuento facilitado por las autoridades sanitarias gallegas.

Asturias se ha mantenido por debajo de los cien positivos: en concreto, ochenta nuevos contagios, seis más que el viernes, en una jornada en la que no se han registrado fallecimientos.

En Andalucía, los ingresados por el coronavirus han descendido por cuarto día seguido y se han situado en 1.285, 99 menos que ayer, aunque los que están en la UCI se mantienen en los 346 desde el viernes, según los datos de la Consejería de Salud, que el domingo no informa de fallecidos, nuevos contagios ni de la incidencia.

La Comunidad Valenciana ha sumado este domingo 114 nuevos contagios y ha cerrado así una semana en la que ha vuelto a subir la incidencia y los brotes, aunque ha seguido bajando la presión hospitalaria.

La edad de los pacientes ingresados por esta infección en los hospitales de esta comunidad ha descendido desde principios de año, cuando la mayoría de pacientes superaba los 75 años, y ahora el grupo más numeroso es el de 51 a 65 años, como ocurrirá en otras regiones.

Las fiestas ilegales persisten

Y mientras las fiestas ilegales no cesan pese a las prohibiciones para frenar la pandemia, con cientos de desalojados por la Policía este fin de semana en celebraciones que incumplían las restricciones.

Unas 1.200 personas fueron desalojadas la pasada noche de fiestas ilegales en locales cerrados y en las calles en Barcelona, y la Guardia Civil también desalojó en la noche del viernes en Ciempozuelos (Madrid) a unos 400 estudiantes que participaban en una "macrofiesta" universitaria en una finca.