La juventud ha vuelto a tomar la Cumbre del Clima. Lo han hecho para demostrar al mundo, una vez más, que sus compromisos por salvar el planeta están pasos por delante de los que pueden mostrar los dirigentes mundiales. En una rueda de prensa multitudinaria, representantes del Fridays For Future de cada continente han llamado a la acción. Porque, más allá de sus protestas, sólo les queda eso, pedir cambios inmediatos y estructurales.

Joel Peña, un joven chileno que ha dado voz a los pueblos latinoamericanos, ha dejado claro que el globo sur ya está palpando con la yema de sus dedos las consecuencias de la emergencia climática. “Lo que está pasando en mi país y en el resto del continente es un síntoma de que esto es un problema global. Nuestro modelo económico y político no ha sabido proporcionar dignidad a los individuos ni proteger los ecosistemas que sostienen la vida”, ha expuesto el activista, que no ve posible avanzar en la lucha contra la crisis climática si no hay compromisos políticos basados en la justicia y la equidad.

El representante del continente latinoamericano también ha querido alzar la voz por sus compatriotas, por aquellos que llevan más de un mes protestando contra el presidente Sebastián Piñera, pero también por los activistas que durante años han puesto sus vidas al servicio del activismo en defensa de la Tierra. Las violaciones de derechos humanos se suceden en Chile cada día, ha manifestado, "pero también en otros países como Brasil, Colombia o México, donde los indígenas son perseguidos y asesinados".

La joven representante del continente africano ha querido ahondar en cómo el cambio climático tiene consecuencias desiguales entre los países el norte y del sur. "No podemos esperar ni tres, ni cuatro, ni cinco años para recibir la financiación adecuada", ha argumentado, en referencia a las negociaciones de la COP en torno al fondo climático de 100.000 millones de dolares. La activista ha apoyado la urgencia en los cambios veloces que está sufriendo África en los últimos años: "Estamos siendo azotados por ciclones, el lago de Chad está siendo reducido, el Congo está siendo deforestado". Todo ello, ha culminado, desemboca en un problema de acceso a los recursos que hace tiempo empezó a manifestarse en la escasez de agua.

"Me pregunto cuándo va a ser África el centro de la financiación contra el cambio climático, cuando recibirá la atención que necesita para solventar la crisis. Recuerden, las discusiones que los líderes tienen en esta conferencia serán determinantes para construir o destruir el continente", ha zanjado.