Se multiplican las críticas hacia el reciente taller infantil que simulaba la fabricación y lanzamiento de cócteles molotov durante las fiestas de la localidad barcelonesa de Granollers. Mientras que el Ayuntamiento, dirigido por la socialista Alba Barnusell, ha rechazado la actividad, calificándola de "intolerable", la Fiscalía de Menores ha instado a los Mossos d'Esquadra y a la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia (DGAIA) a identificar si hubo menores en desamparo o desprotección.

En esta línea, la fiscal alega que dicha actividad presenta "indicios posiblemente delictivos dentro del ámbito penal". Ello ha llevado al Ministerio Público a actuar dentro de sus competencias protectoras para que se pueda localizar a menores que "hayan participado o se hayan colocado, por ello, en situación de riesgo".

La actividad, que consistía en arrojar objetos de ropa simulando ser un cóctel molotov, apuntando hacia un muñeco vestido de policía, suscitó la crítica de numerosos sindicatos policiales, que elevaron este miércoles una denuncia criminal por la posible comisión de un delito de odio y otro de injurias graves contra los cuerpos y fuerzas de seguridad. 

Este jueves, la consellera de Interior y Seguridad Pública de la Generalitat, Núria Parlon, ha determinado que la actividad desarrollada en el mismo "daña el carácter lúdico y festivo que debe tener un acontecimiento tan importante como es la Fiesta Mayor de una ciudad o un pueblo, donde no puede tener cabida la incitación a la violencia".

A su juicio, la libertad de expresión garantiza el derecho de cualquier persona a "expresarse críticamente en relación a una actuación policial o a una institución", pero "hay que defender que esta crítica no pueda leerse como una incitación a cualquier tipo de violencia". Así, la titular de Interior ha reiterado el "apoyo inequívoco" del Govern a los cuerpos policiales: "Son un pilar básico y garante de una sociedad democrática", ha señalado.