María José López, abogada de la Asociación de Futbolistas Españoles, denuncia que la norma federativa es discriminatoria por razón de género. Uno de los casos en los que está involucrada es el de Claudia, una niña de 13 años que no podrá seguir jugando al fútbol en equipos mixtos debido a la norma, que solo afecta a las niñas. El reglamento federativo frustra el futuro deportivo de algunas deportistas, que abandonan el fútbol por esta causa, asegura la experta.

Claudia quiere seguir jugando al fútbol con su equipo el año que viene y no podrá hacerlo porque el reglamento federativo de Castilla y León no se lo permite, ya que no hay equipos mixtos.

"El de Claudia no es un caso aislado, son casos reiterados en España", dice la abogada a EFE. Considera que en algunos casos la normativa federativa puede limitar los derechos de las niñas debido a que en el fútbol no profesional, las federaciones optan por concentrar a las jugadoras en equipos femeninos y apenas hay equipos mixtos en España.

"Esto supone que las jugadoras tengan que tomar decisiones que a los chicos no se les plantean", explica la abogada a EFE. Y sucede en España, donde se destina dinero a fomentar el deporte femenino y se habla de ello en las administraciones. "¿Y si se destina tanto dinero a fomentar el deporte femenino, por qué las mujeres no llegan a la élite?", se pregunta María José López. La respuesta para la abogada es sencilla: "Por casos como el de Claudia, una niña cuya proyección deportiva se frustra solo por ser mujer".

La abogada del sindicato de futbolistas también señala la importancia de las administraciones públicas ya que se trata de una menor y de deporte escolar. Afirma que las comunidades "no pueden mirar hacia otro lado" cuando "la norma federativa discrimina a las niñas solo por el hecho de ser niñas".

La abogada de la Asociación de Futbolistas Españoles insiste en que el deporte es competencia de la Administración y que estas deben hacerse cargo ya que se trata de una norma que "discrimina y expulsa a la chica de un club, cosa que no hace con los chicos de su misma edad". "Lo importante es no estigmatizar a las niñas y que la causa de Claudia no se vea como un capricho", señala la abogada, insistiendo en que no puede haber un reglamento que obligue a una niña a dejar el fútbol, solo por su género.

Una historia similar a la de Claudia es la que vivió Tania Tabanera, responsable del departamento femenino de la Asociación de Futbolistas y colaboradora en Goleadoras, que hace 20 años vivió una situación parecida a la de la menor pero en Madrid. "Es una norma bastante generalizada, la de que a partir de los 14 años no puede haber equipos mixtos", afirma. Ella tuvo que irse a un equipo femenino "con mujeres adultas" y a 80 kilómetros de su casa mientras todos sus amigos siguieron jugando juntos.

"Te sientes fuera de lugar. Tuve que compartir vestuario con mujeres mayores y eso para mí fue un problema, porque estás en conversaciones de adultos", cuenta, porque al parecer, "es más adecuado que meter a una niña en un ambiente de adultos que dejarla seguir jugando con niños de la misma edad".