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Víctor Camino (JSE): "A la juventud nos corresponde ser punta de lanza contra el cambio climático"

El secretario general de Juventudes Socialistas, Víctor Camino, durante la entrevista con Público.
El secretario general de Juventudes Socialistas, Víctor Camino, durante la entrevista con Público. Alfredo Langa

Este 12 de agosto se conmemora el Día Mundial de la Juventud. Las Juventudes Socialistas de España (JSE) cuentan con más de 10.000 personas afiliadas, siendo una de las organizaciones políticas juveniles con mayor presencia en nuestro país. El pasado mes de noviembre se renovó la dirección tras un proceso de primarias. Víctor Camino (Valencia,1994) se convirtió en el nuevo secretario general. Es graduado en Ciencias Políticas por la Universitat de Valéncia y desde 2018 ejercía como líder de la organización en Valencia. Además, ha sido responsable de Redes Sociales del Gabinete de Comunicación del PSPV-PSOE durante tres años hasta que en febrero de 2020 empezó a trabajar en la Generalitat Valenciana como responsable de la Comunicación Digital y las Redes Sociales del Gobierno autonómico. En esta entrevista con Público repasamos algunas de las principales inquietudes de JSE y los retos pendientes para la juventud, aparte de otras cuestiones de actualidad. 

Lleva menos de un año en el cargo. ¿Qué balance hace de estos meses?

Un balance positivo. Han sido meses bastante duros por el contexto que hemos vivido, con el auge de la pandemia a principio del mandato, después las consecuencias económicas y sociales de la guerra. Pero el balance es positivo porque hemos conseguido vertebrar la organización y ponerla a punto, en marcha para conseguir catalizar propuestas de gente joven. Y también ampliar la participación de gente que no sabía cómo transformar su inquietud en política y lo ha hecho afiliándose a las Juventudes Socialistas durante este tiempo.

¿En qué estado de salud se encuentran las JSE? ¿Se ganan afiliados? ¿Se pierden? ¿Se mantienen?

Se va ganando progresivamente. Es cierto que la desescalada y este nuevo tiempo ha hecho que mucha gente quiera participar, quiera volver a reencontrarse. Y nosotros hemos actuado como ese punto de encuentro para que la gente haga políticas de izquierda y sepa a través, sobre todo del municipalismo, cómo poder cambiar las cosas. Creo que es nuestra gran valía como organización política centenaria, que lleva más de un siglo, 119 años hacemos en 2022. Y es cierto que nosotros estamos ahora pensando en todo lo que queda por recorrer. De momento hago un balance muy positivo y sobre todo por ese espacio de que la gente quiere volver a reencontrarse.

En su caso personal, ¿qué le llevó a empezar a militar en una organización política?

A mí me ha gustado siempre la política y no sabía muy bien por dónde empezar. Y es cierto que yo vengo del País Valencià, un territorio que estaba fuertemente castigado por la corrupción de la derecha, por la corrupción del PP. Yo quería participar del cambio político. Quería ponerme a disposición de un proyecto colectivo para conseguir tirar o desalojar a esa banda de ladrones, que por fin en 2015 conseguimos hacerlo. Aparte por una cuestión de clase incluso, de un barrio humilde en el que había visto cómo mis amigos y amigas tenían algunas dificultades después de la crisis de 2008. Creía que había que hacer algo, que la respuesta tenía que ir por la izquierda y que la respuesta debía ser socialdemócrata. 

Hay un mantra extendido que dice que la juventud no le interesa la política o que hay desafección. ¿Qué le diría a la gente que mantiene estas afirmaciones?

"Hay una desafección generalizada en todas las capas y en todos los estratos de la sociedad"

Hay una desafección generalizada en todas las capas y en todos los estratos de la sociedad. Ahora bien, yo he visto mucha gente comprometida políticamente. Yo creo que los jóvenes estamos en voluntariados, en asociaciones, etc. Y al final se trata desde cada punto o desde cada situación hacer política. Creo que lo personal es lo político y que cada día, desde que te despiertas hasta que te acuestas, haces política, luchas por varias causas y consiste en irte con la conciencia tranquila a dormir sabiendo que el mundo ha sido un poquito mejor con tu paso. Eso yo creo que es lo fundamental

¿Cuáles diría que son los principales problemas que afectan hoy en día a la juventud en España?

Creo que hay varios. En primer lugar, está el tema de la formación y el trabajo. Una formación que necesita adaptarse a los retos del nuevo mercado laboral, de la nueva economía y que necesita hacerlo con calidad y dignidad salarial y laboral. Ese es el principal, adecuar esas cuestiones potenciando la FP y potenciando también una Universidad que se asemeje a lo que está ocurriendo en el mercado laboral. Por otra parte la cuestión climática. Creo que nos corresponde ser esa punta de lanza contra el cambio climático, contra las consecuencias que puede traer. Y por último también una cuestión de inclusión, donde entrarían cuestiones de diversidad. Frente a la reacción que estamos observando en algunos lugares, en algunos sitios, estar frente a ello con más inclusión, más diversidad, más feminismo e incluso temas de salud mental. Porque la gente que padece cuestiones de salud mental provocadas por trabajos indignos, por sentirse excluido incluso por el cambio climático necesitan estar dentro de la sociedad y no se les puede apartar. Yo creo que esos serían los los tres retos principales aglutinados en varios espacios.

Camino, en otro momento de la entrevista.
Camino, en otro momento de la entrevista. Alfredo Langa

Cuando entró al cargo apuntaba que las JSE iban a defender una reforma constitucional en clave verde para abordar la emergencia climática. ¿En qué consiste la propuesta?

Al final es conseguir que haya una perspectiva climática y verde en la Constitución de manera transversal. Pero que también seamos vanguardia a nivel europeo en cuestiones verdes. Es cierto que ahora mismo parece que la responsabilidad frente al cambio climático es individual y para nada, es una cuestión colectiva. Hay que poner a las empresas, a las instituciones y la ciudadanía a la misma altura para que se comprometan contra el cambio climático. También por una cuestión,  que lo hemos visto estas pasadas semanas con todos los incendios y las olas de calor, que siempre han afectado a la clase trabajadora. Por lo tanto hay que hacer una gran reforma que lidere esa respuesta verde que facilite, por ejemplo esa transición a energía verde y renovable que traslade de una manera esa idea abstracta de transición ecológica a políticas concretas y que genere un marco de seguridad para ello.

Por ejemplo, en cuestiones concretas, necesitamos más plantas fotovoltaicas, más energía eólica para ser autosuficientes, para garantizar la soberanía energética. Si conseguimos garantizar la soberanía energética y alinearnos con Europa con un marco constitucional verde, yo creo que seremos vanguardia y España podrá estar orgullosa. Ya lo estuvo en materia de derechos LGTB, ya lo está en materia de feminismo y ahora mismo tenemos que estarlo en cuestiones climáticas y en cuestiones verdes.

Ha hablado de feminismo y diversidad. ¿Nota que hay una brecha generacional y que desde la juventud se está empujando a hacer ver la importancia de estos temas?

Ahora mismo las generaciones que hemos llegado somos mucho más tolerantes en el sentido de que hemos convivido con grandes reformas que abrieron camino. Con grandes referentes, grandes personas que lucharon, se vieron sometidas a insultos, a exclusiones y a difamaciones para que ahora podamos gozar de estos derechos como el matrimonio igualitario. De derechos también como la cuestión del aborto que ahora se cuestiona. Eso fue en parte gracias a gobiernos socialistas y ahora lo que tenemos que hacer ver como generación o como Juventudes como socialismo es que los derechos no aparecen por accidente.

"Estoy muy orgulloso de mi organización, del papel que tuvo con la 'ley trans'"

No se junta una fórmula y de repente aparece un derecho en un laboratorio sino que es fruto de muchos años de lucha colectiva. Que el individualismo erosiona o es corrosivo para la democracia y necesitamos generar otra vez espacios de cuestión colectiva y cuestión común para resolver o para enfrentarnos a los reaccionarios y seguir avanzando en derechos. Como por ejemplo la ley trans que es un avance, que en pleno 2022 tiene que resolverse y tiene que proteger derechos, nuevos derechos de personas que lo están pasando mal. 

No es ningún secreto que dentro del propio PSOE hay diferentes visiones sobre la ley trans. ¿La postura de JSE es clara?

Esto es sencillo. Estuvimos, estamos y estaremos. Puede haber diferencias, puede haber miradas plurales pero una organización o Juventudes Socialistas o el PSOE no es un dogma. Es dinámica y no para. Debíamos estar en el lado correcto de la historia y debíamos presionar para conseguir que personas pudieran tener ese derecho a ser y a existir. Y que no se vieran minusvaloradas o infravaloradas en el mercado de trabajo en su día a día por el hecho de ser personas trans. Yo estoy muy orgulloso de mi organización, del papel que tuvo y sobre todo de lo que vamos a tener. Porque esto no para. Dentro de unos meses habrá nuevos derechos a los que responder y también habrá un paradigma reaccionario al que habrá que hacer frente y se le puede hacer frente de dos maneras. Una, a la defensiva como a veces nos hemos colocado la izquierda, o a la ofensiva. Y creo que ahora mismo es el momento de estar a la ofensiva en derechos, en libertad e incluso en cuestiones valientes como ha demostrado el Gobierno de España. 

¿Están bien representadas las JSE dentro del PSOE? ¿Se les tiene en cuenta?

"Nos dicen a veces que somos el futuro, pero nosotros queremos ser el presente"

Sí, es cierto que vivimos en una burbuja mediática en la que solo se ve lo que ocurre diría en Madrid pero voy a decir en España porque hay vida inteligente fuera de Madrid. Es cierto que en los municipios, a nivel de federaciones o de Comunidades Autónomas, existe una gran incidencia de las Juventudes Socialistas liderando, por ejemplo, políticas que tienen que ver desde la Hacienda Pública al empleo en la juventud en muchos municipios y siendo la vanguardia en esas cuestiones. Nos dicen a veces que somos el futuro, pero nosotros queremos ser el presente. Escuchaba hace poco también una reflexión de que no podemos ambicionar el futuro sino que tenemos que tener hambre de presente. Ahora mismo estamos siendo escuchados y poniendo la perspectiva joven en cada una de las políticas. Ayudando a la Ley de Ciencia, ayudando también con reuniones a las cuestiones que tienen que ver con los contratos de prácticas, con las prácticas extracurriculares.

Hacemos una gran tarea, de reflexionar todas las políticas y ver cómo afectan a la gente joven. Cómo la reforma laboral afectó a millones de personas jóvenes. Cómo la subida del salario mínimo afecta también a mujeres y a jóvenes. Y en ese sentido nosotros, con nuestra ponencia que que va también ajustándose al contexto, tenemos la capacidad de influir desde el nivel más local pequeñito hasta el nivel más global en políticas que tienen que ver con el Gobierno de España. La Ley de Ciencia es un buen ejemplo de ello.

Ha mencionado alguna cuestión pero, ¿qué otras políticas concretas han beneficiado a la juventud?

El Plan Estatal de Vivienda creo que es muy positivo. Aparte va combinado con la Ley de Vivienda y con el bono joven de alquiler. Son una tríada de políticas que también ayudan a un grave problema que tenemos como generación que es la la emancipación y poder salir de casa de nuestros padres con más de 30 años. Es una absoluta locura y tenemos que ir a ello. También cuestiones relacionadas con el bono cultural que va a salir también y que está ya a disposición de proveedores y empresas para conseguir universalizar la cultura y hacerla accesible a todo el mundo. En cuestiones de Función Pública y de alta Judicatura también han salido becas que hacen que el hijo del trabajador y la trabajadora, que el hijo de las personas humildes puedan llegar a esos puestos siendo becados.

Eso al final son cuestiones importantes porque van al corazón o atacan al corazón de las desigualdades. Continuamos viviendo en un mundo y en un país donde la desigualdad va por barrios, va por códigos postales. En esos espacios es donde tenemos que estar y donde tiene que estar el Gobierno haciendo izquierda. Si decimos izquierda, hacemos izquierda y estamos en esas periferias sociales económicas y laborales donde desgraciadamente aún muchos jóvenes se encuentran. 

Ya que lo ha mencionado, se ha interpretado este último mes con el debate del estado de la nación que el Gobierno de Sánchez  ha girado a la izquierda. ¿Está de acuerdo?

"Este Gobierno ha sido de izquierdas desde el principio"

Este Gobierno ha sido de izquierdas desde el principio. Ha abordado grandes cuestiones como subida de las pensiones. El salario mínimo interprofesional, cuando llegó en 2018 Pedro Sánchez estaba en 720 euros. Ahora está en 1.000 euros. Siempre ha acometido reformas valientes y ha conseguido también generar esa expectativa progresista de izquierdas. Ocurre que en esta serie política que parece de Netflix cada capítulo tiene que darnos dopamina y tiene que generarnos un estímulo para para engancharnos a esta trama. Yo creo que debemos dejar ya de estar en permanente sobresalto y empezar a consolidar todas las medidas de izquierda, en ponerlas en perspectiva. Esto ya no son cuestiones de ser más de izquierdas o menos de izquierda. Esto es cuestión de que la gente viva su día a día mejor.

Y con estas políticas la gente vive mejor. Yo veo un ejemplo concreto con mis amigos, que en 2018 trabajaba la mitad y ahora mismo están todos trabajando y el  80% tiene un contrato indefinido después de haber estado años encadenando contratos precarios. Que hayamos pasado de dos de cada 10 contratos indefinidos a 8 de cada 10 dice mucho de este Gobierno. Y sobre todo creo que estabiliza unas vidas que luego pueden alquilar un piso o pedir una hipoteca gracias a esas cuestiones como más estabilidad laboral. Eso es al final el objetivo. ¿Eso es de izquierdas, eso no es de izquierdas? Yo creo que es de izquierdas porque afecta a la gente trabajadora, pero eso no es un giro. Eso ya estaba desde enero y ahora mismo se consolidan o se pone en perspectiva la valentía de un Gobierno que tiene que afrontar un contexto muy difícil.

¿Cómo valora los cambios realizados en el PSOE en el Comité Federal del 23 de julio? ¿Eran necesarios?

El PSOE está en permanente cambio. Estas decisiones se enmarcan en un contexto de revulsivo frente a las consecuencias de la guerra, de la pandemia. Para afrontar un nuevo tiempo de más empatía, de más contundencia y solvencia. Y llegar mucho más a las calles para ser esa opción política que ha sido tan importante para la ciudadanía durante estos últimos años. Simplemente quiero agradecer la cooperación de Héctor y Felipe, y por supuesto de Adriana. Y dar todo el máximo apoyo a Pilar, Patxi, María Jesús, Juan Francisco, Iván y Miquel para desarrollar ese proyecto joven que se merece este país y se merece también una generación que aún le quedan muchos derechos que recuperar. 

¿Qué le parece la polémica creada con el decreto del ahorro energético y la oposición del PP? ¿La ciudadanía entiende que hay que ahorra energía?

Europa es la respuesta frente al reto energético y el Gobierno ha conseguido un acuerdo que hace más leve el ahorro. El PP ve siempre problemas y no sé da cuenta que el problema son ellos. Tienen un "no" por respuesta antes de cualquier pregunta, la gente espera más de Feijoó, comprende perfectamente las medidas, la sociedad no es negacionista.

Ha sido responsable de comunicación y RRSS en el Govern del País Valencià. Cómo comunicar los logros del Gobierno de Sánchez y rentabilizarlos ha sido uno de los puntos de debate público. ¿Cómo cree que puede mejorar?

"El Gobierno debe poner negro sobre blanco todas las políticas que ha hecho"

Es una cuestión de la atmósfera. Hay una atmósfera de pesimismo, de cansancio. Venimos psicológicamente tocados tras una pandemia que ha hecho que no podamos socializar. Ahora de repente una guerra las puertas de Europa. Es muy complicado comunicar o prestigiar el optimismo en estos momentos. Pero sí que es cierto que ahora mismo vivimos en un panorama de horizonte de esperanza y ahora el Gobierno debe poner negro sobre blanco todas las políticas que ha hecho. Y en vez de hablar tanto de cifras, tanto de porcentajes, hablar más de historias personales como la que estaba contando antes que ayuden a entender cómo afecta labor de este Gobierno. Y que también lo comparen con otros Gobiernos donde dicen que, por ejemplo, si te toca la lotería con 3 millones de euros, lo que tienes que hacer es pedir una beca a Madrid. 
Hay algunos que quieren subvencionar la riqueza. Esos no sé si comunican mejor o peor.

Nosotros queremos ayudar a la gente que lo está pasando peor después de una de una pandemia y una guerra donde se han perdido calidad de vida. Para que exista comunicación debe existir estrategia de acción. Sin una no se entiende por la otra. Sobre todo tenemos que empezar ya a tumbar esa atmósfera de pesimismo de que las cosas van a ir peor. Somos progresistas porque creemos que todo va a ir a mejor y que está todo por escribir. No podemos ya dar cosas por sentado. Al final en comunicación la receta es que haya algo siempre que comunicar y que sea con una estrategia para que la gente lo pueda entender.

Uno de los asuntos en los que suele diferenciarse las JSE en los diferentes congresos federales del PSOE es el tema de la monarquía. ¿Cuál es la posición de JSE?

"¿Cómo materializamos ese camino hacia la República? Pues sobre todo convenciendo a la derecha"

Nosotros y nosotras somos republicanos convencidos. Están en todos nuestros congresos, en todas nuestras ponencias y en todas nuestras estrategias. Ahora bien, ¿cómo materializamos ese camino hacia la República? Pues sobre todo convenciendo a la derecha. Vivimos en un momento en el que se necesitan dos tercios de la Cámara para conseguir grandes reformas a nivel constitucional. No nos vamos a hacer trampas al solitario y vamos a intentar que la derecha entre. Yo con Bea Fanjul tengo una relación cordial, con Nuevas Generaciones. Siempre le digo lo mismo: vamos a pactar una República a 5, 10, 15 o 20 años. Pero vamos a hacerlo, porque sin esa parte de la sociedad no podemos. Lo que pasa es que ya estoy empezando a observar, que mucha gente que se considera de derechas o centro derecha, ya está cansada de que el rey mérito haya presuntamente expoliado a todos los españoles y las españolas. Eso no es patriotismo. Por ello creo que ese ambiente, o ese estado o ese momento ese estado de ánimo está en la sociedad. Solamente queda que los responsables o que las organizaciones de derechas entren en ese momento y nos ayuden a construirla poco a poco.

No podemos pedirla de la noche a la mañana. Debemos hacerlo pasito a pasito y de forma forma inteligente y rigurosa sobre todo. Sin estridencias y poniéndonos a mirar cómo una República repercutiría la calidad de la democracia pero también cómo hay retos relacionados con la vivienda, con el mercado laboral, con la economía o con cuestiones de salud mental que ayuden a mejorar el día a día de la gente. Una República no solucionaría todos los problemas de hoy para mañana pero sí que nos haría mejores y mejores demócratas.

¿Y no cree que al PSOE le falta valentía para poner este tema sobre la mesa?

Necesita siempre un consenso global y que esté la derecha. El PSOE tiene ese itinerario de mejorar la vida de la gente. Con la que ha caído estos años, dos crisis, el PSOE tiene una posición de generar estabilidad. Nos toca a nosotros como generación abrir esos melones pero no mirándonos al ombligo. Sino saliendo y hablando con las NNGG o Podemos para hacer un ejercicio de sinceridad. ¿A dónde queremos llegar? ¿Queremos llegar realmente o mantener nuestras ideas en cuatro paredes para autoreafirmarnos?. Esa es la cuestión y que la izquierda tiene que preguntarse. 

¿Qué valoración hace del nuevo espacio político que pretender impulsar Yolanda Díaz? Parece inevitable que deberá entenderse con el PSOE

"Yolanda Díaz abre el espacio que representaba en su momento Podemos"

Es un movimiento interesante. Creo que abre el espacio que representaba en su momento Podemos y que lo hace más atractivo para para mucha gente progresista. Ahora bien, necesitamos motivar toda la izquierda, a esos votantes que después de ver lo que ha ocurrido necesita un revulsivo. Si esto ayuda, bienvenido sea. Tenemos que hablar menos de caras, menos de imágenes, menos de marcas y más de problemas cotidianos y de problemas reales. Si el movimiento que representa Yolanda lo hace, es capaz de generar esa ilusión, bienvenido sea sabiendo que no hay atajos para que la izquierda esté en el Gobierno del país. Todo cambio político o todo mantenimiento de un Gobierno progresista de izquierdas pasa porque lo lidere el PSOE y en este caso porque lo lidere Pedro Sánchez. Es una cuestión que hay que repetir mucho, sobre todo a los movimientos a la izquierda del PSOE. Sin el PSOE no pueden alcanzar esos grandes cambios o no pueden incorporar su mirada. Por ello seamos más leales todos con todos y empecemos a hablar, en vez de caras, en vez de marcas, de para qué hemos venido. Para qué estamos aquí. Que es para que la gente o el día a día de la gente sea un poquito mejor. 

El secretario general de JSE, durante la entrevista.
El secretario general de JSE, durante la entrevista. Alfredo Langa

Para terminar, antes ha mencionado a la líder de NNGG. Tengo la sensación de que las organizaciones juveniles rivales tienen mejores relaciones que las de "mayores". ¿Lo ve así? 

Es cuestión de carácter y de generación. Creo que el ejemplo que debe dar nuestra generación es ser mucho más empático, mucho más natural  y mucho más auténtico que la generación de nuestros mayores. Ha pasado siempre por no tener el foco tan tan directo, por no tener el día a día de la teatralización de del propio Parlamento. Pero creo que a la política le viene bien bajar los decibelios del ruido y empezar a entenderse desde la diferencia. Tengo diferencias abismales, pero nunca retiraría el saludo a nadie. Sí que lo combatiría y en algunos momentos incluso, pues de manera más contundente, sobre todo con los movimientos que han aparecido también últimamente de la extrema derecha. No es plato de buen gusto conversar con personas que te quieren excluir o te quieren erradicar de la sociedad. Pero es cierto que hay personas, hay políticos, hay organizaciones juveniles, con las que nos tenemos que entender. El Consejo de la Juventud es un buen espacio para ver esa pluralidad, gestionarla y para intentar hacer ver a nuestra generación que hay espacios para organizarse y para participar. No son cajas de eco que no hablan con nadie o que no son críticas, sino que somos autocríticos y que tenemos esa capacidad de tener una relación con nuestro diferente.

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