Una y otra vez aparecen en los discursos de PP y Vox, y una y otra vez piden que les dejen en paz. Las víctimas del terrorismo están hartas de la utilización partidista que se realiza de su sufrimiento en vísperas de las elecciones, pero en las oficinas de Feijóo y Abascal no se dan por aludidos: la estrategia de recurrir a ETA para conseguir votos está hoy más activa que nunca.

"Se trata de una utilización partidista del dolor ajeno, y yo lo llevo denunciando desde 1998", dice al otro lado del teléfono Robert Manrique, sobreviviente del atentado de Hipercor en Barcelona. El debate electoral del lunes, durante el cual Alberto Núñez Feijóo volvió a recurrir a ETA para atacar a Pedro Sánchez, le sirvió a Manrique para constatar que, muy a su pesar, esa estrategia sigue activa.

"Todo esto lo vives de una forma muy dura. Son tipos que no tienen ningún tipo de sentimiento a la hora de tratar de arañar votos con el dolor que tú has sufrido en carne propia", afirma esta víctima.

La campaña electoral coincide con un nuevo aniversario del asesinato  de Miguel Ángel Blanco, algo que el PP busca aprovechar para agitar el escenario político y desacreditar a Sánchez bajo la acusación de pactar con los "herederos" de ETA, en alusión a EH Bildu.

La estrategia del PP choca sin embargo con la realidad social y política de Euskadi. Según confirmó el último sociómetro vasco, publicado en octubre de 2022, el terrorismo ha desaparecido del listado de preocupaciones de la ciudadanía. 

Del mismo modo, se ha comprobado que la insistencia de los populares en recurrir a ETA no da grandes réditos electorales en Euskadi: el PP es a día de hoy una fuerza política con escasa representación en las principales instituciones de este territorio.

En las elecciones municipales del pasado 28 de mayo, pese a lograr unos resultados mejores que en anteriores citas electorales, el partido de Feijóo logró 71 concejales en todo el País Vasco –16 más que en la anterior legislatura– frente a los 1.050 de EH Bildu, 981 del PNV o 207 del PSE. 

"Utilización perversa"

"Aquí hay una utilización perversa de la violencia, incluso una actitud que raya con el insulto a las propias víctimas de la violencia", afirma Joseba Azkarraga, ex consejero de Justicia del Gobierno Vasco y portavoz de Sare, un colectivo que aboga por normalizar la situación penitenciaria tras la desaparición de ETA.

A su juicio, en el caso de Euskadi el PP logra "el efecto contrario al que persigue". "Saben que ETA ya terminó hace más de 12 años y que estamos viviendo una etapa diferente: hay que trasladar mensajes a la sociedad vasca sin olvidar, pero sin odiar", remarcó. 

Pili Zabala es hermana de Joxi, asesinado por el GAL. A ella también le repugna la utilización política de las víctimas de ETA por parte del PP, que al mismo tiempo suele obviar de su discurso a quienes, como Joxi, sufrieron el terrorismo de estado. "Quiero mostrar mi hermanamiento y fraternidad hacia las víctimas de ETA. Hay que decir basta ya a determinados grupos políticos", remarcó.

"Campaña rastrera"

Ese "basta ya" sonó fuerte este martes. La Fundación Fernando Buesa y Covite dieron a conocer un comunicado conjunto, suscrito además por varias víctimas de ETA a título individual, en el que exigen a PP y Vox que dejen de utilizar el lema "que te vote Txapote" y reclaman que se abandone la utilización del sufrimiento de las víctimas del terrorismo con fines partidistas.

Tras conocer ese comunicado, Manrique contactó desde Barcelona con los promotores de esta declaración para mostrar su apoyo, al tiempo que criticó la "campaña rastrera" de quienes "utilizan el sufrimiento ajeno para rapiñar votos". "Los que más se llenan la boca hablando del respeto que merecemos las víctimas son los mismos que luego faltan a esa dignidad y a esa memoria", lamentó.