El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha calificado este miércoles de "inquietantes" y "perturbadoras" las últimas informaciones sobre las actividades del rey emérito, Juan Carlos I. "Nos perturban a todos, a mi también", aseguraba, en el que es el primer pronunciamiento público del Ejecutivo sobre esta materia.

Apenas un día después de que la portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, se esforzase por desvincular la sombra de corrupción que planea sobre el padre del jefe del Estado del actual rey, Felipe VI, Sánchez se ha mantenido en esta línea. "La Casa Real está marcando distancias frente a esas informaciones, inquietantes, perturbadoras, y eso es algo que yo agradezco". 

El presidente del Gobierno ha incidido en que hay medios de comunicación "que no miran a otro lado" y "se hacen eco" de estas revelaciones, y ha recordado que "la justicia actúa". La Fiscalía del Tribunal Supremo asumió hace un mes la investigación a Juan Carlos I por el AVE a La Meca. 

De hecho, y aunque el presidente del Gobierno califique como "perturbadoras" estas informaciones, el Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados ha votado junto a PP y Vox en contra de la apertura de una comisión parlamentaria que investigase las actividades del emérito. Unidas Podemos votó a favor. 

Sánchez ha comparecido este miércoles en rueda de prensa junto a su homólogo italiano, Giuseppe Conte, de visita en La Moncloa, y ambos han escenificado su unión -también lo han hecho con Portugal en los últimos días- de cara a la negociación del reparto de los fondos europeos tras la pandemia del coronavirus, que se debatirá en la cumbre europea de los días 17 y 18 de julio. 

Sánchez ha repetido que julio debe ser "el mes del acuerdo", y Conte ha defendido que toca "enviar un mensaje fuerte", ser "osados" y dar una "respuesta fuerte" desde la UE. Si los 27 no lo hacen, decía, "se destruiría el mercado único".

Ambos se han reunido esta semana con el primer ministro portugés, Antoniò Costa -Sánchez el lunes, Conte el martes-, si bien ambos han incidido en que no está sobre la mesa la construcción de un eje del sur frente al norte, donde se localizan el grueso de los Estados que confrontan con las posiciones de España, Italia y Portugal, y hasta con la propuesta de la Comisión Europea.

En su lugar, presionan en favor de un plan de ayudas fuerte, que permita recuperar la actividad económica tras el impacto de la pandemia y relanzar el proyecto europeo, que quedará en cuestión de no lograrse una respuesta unitaria.

Calviño y la ausencia de "vergüenza" para recurrir al MEDE

En otro orden de cosas, Sánchez ha respondido que, por el momento, España no contempla acudir a los créditos del MEDE -"Ojalá no nos veamos obligados a utilizarlo"-, si bien ha pedido que no se afronte con "vergüenza" el recurso a un mecanismo implantado para auxiliar a todos los Estados europeos.

Además, mientras Conte mostraba su apoyo a la candidatura de la vicepresidenta española de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, a presidir el Eurogrupo, Sánchez ha desligado esta candidatura de la negociación del fondo de reestructuración. Como en días pasados, se ha mostrado "razonablemente optimista" sobre las posibilidades de que Calviño llegue a este cargo, algo que se sabrá este jueves. 

En última instancia, preguntado por los rebrotes de la pandemia del coronavirus, Sánchez ha repetido que "no existe el riesgo cero" y que toca "convivir con el virus", si bien ha considerado que la situación está controlada, y que las comunidades autónomas tienen sus sistemas sanitarios mucho más preparados hoy para afrontar nuevos rebrotes. 

"Parece que las comunidades autónomas tienen instrumentos para confinar", apuntaba, aunque en su día "se puso en duda" por parte de algún actor político.