Fue el primer mitin y puro y duro de la precampaña electoral. Y Pedro Sánchez no pudo escoger un foro más agradecido que el de la Convención de Partidos Socialdemócratas europeos que celebra este fin de semana en Madrid.

El líder socialista habló poco de Europa y mucho del escenario electoral de España, dejando claro que el PSOE arranca la campaña fijándose en Ciudadanos como principal adversario político o, tal vez, como el caladero de votos donde pueden pescar los socialistas.

Lo cierto fue que en su intervención de clausura, Sánchez centró gran parte de sus críticas en el partido de Albert Rivera, y delante de todos los líderes socialdemócratas europeos pidió que se le quitase la etiqueta de liberales porque, en su opinión, no lo son.

“Dejemos de llamar liberal a quien no es liberal. Los liberales en Europa defienden las libertades y hacen gala de no pactar con la ultraderecha, mientras aquí mercadean con las libertades de las mujeres para llegar al poder”, afirmó.

Y no tuvo reparos en recordar que Ciudadanos ha llegado al poder en Andalucía, con el apoyo de “aquellos que quieren hacer listas negras de funcionarios que lucha contra la violencia de género”, en referencia a la petición hecho por Vox.

Para Sánchez, Ciudadanos es un partido “vacío de principios y lleno de oportunismo” como, en su opinión, demuestra que quieran poner un cordón sanitario a los socialistas porque las encuestas le van mal.

La España de "los tres de Colón"

Sánchez hizo también hincapié en que el 28-A no se juega quién gana las elecciones, sino qué modelo de sociedad queremos, “si la que avanza o la que retrocede, si una España en la que cabemos todos o sólo los tres de la plaza de Colón”, dijo.

Por ello, llamó una y otra vez a la movilización, “porque somos muchos más y la abstención será un voto para volver a retroceder a la España de hacer cuarenta años”, afirmó.

El líder socialista también llamó a la movilización el 8 de marzo y se preguntó qué les pasa a las tres derechas con las mujeres, “unos defienden los vientres de alquiler o suprimir el aborto, y otros hasta banalizan la violencia de género”, lo que consideró todo un error, “porque estamos en el siglo de las mujeres”, dijo.

En contraposición, el líder socialista indicó que donde haya un Gobierno con las siglas del PSOE, “habrá un gobierno feminista y que luche por la igualdad entre hombres y mujeres”.

Y, como colofón, anunció que el próximo viernes el Gobierno aprobará por decreto ley medidas para luchar contra la brecha salarial y la igualdad laboral, denunciado que el “filibusterismo político” de PP y Ciudadanos en la mesa del Congreso ha impedido que pudieran ser tramitadas estas propuestas por la vía ordinaria.

Como estaba previsto, Sánchez acabó su discurso sin decir ni una sola palabra de quién será el cabeza de lista al Parlamento Europeo por parte del PSOE, convirtiéndose en el único partido socialdemócrata de viejo continente que todavía no tiene candidato.