MADRID.- El presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, viaja este sábado a Torremolinos (Málaga) para dar el pistoletazo de salida a la campaña de Juanma Moreno, el candidato del PP-A a la Presidencia de la Junta de Andalucía. El exsecretario de Estado de Asuntos Sociales -una apuesta personal de Rajoy- adelantó ayer miércoles la estrategia del líder conservador, que confirman asimismo otros miembros del partido en la Comunidad y que viene apuntándose hace semanas desde Madrid, por ejemplo, por el empeño del líder del PP en firmar el pacto antiyihadista con el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez.

Moreno, en un acto en Málaga con empresarios del sector turístico, tendió este miércoles la mano a la jefa del Ejecutivo andaluz y le ofreció abiertamente alcanzar un "acuerdo de gobernabilidad para evitar que Podemos entre en un Consejo de Gobierno". Obviamente, un gesto así, sostienen fuentes del PP, no se hace "sin conocimiento del presidente" Rajoy o "por indicación de éste".

Las mismas fuentes están convencidas de que se trata de "un paso dado en el marco de una estrategia más amplia", que desembocaría en la llamada gran coalición que se viene reclamando a PP y PSOE desde hace tiempo y desde distintos sectores empresariales, financieros e, incluso, por antiguos dirigentes socialistas. En el PP creen que, aunque los actuales dirigentes del PSOE no quieren ni oír hablar de esa gran coalición, al final, tendrán que elegir entre ellos y Podemos; "entre la estabilidad y la inestabilidad", matizan.

En el PP creen que si Susana Díaz gana sin mayoría absoluta, se dejará apoyar antes por su candidato Juanma Moreno que por Teresa Rodríguez (Podemos)

De darse esta situación, que apuntan todas las encuestas, los conservadores están convencidos de que el PSOE acabaría apoyando a un Gobierno en minoría del PP en Andalucía, o -más probable a tenor de los sondeos- aceptando el respaldo de Moreno en lugar del de Teresa Rodríguez (Podemos Andalucía) si gana Díaz. En el PP descartan por completo que IU vuelva a pactar con la líder del PSOE-A. Andalucía se convertiría de este modo en el laboratorio de la gran coalición que a Rajoy le gustaría alcanzar en Madrid tras las elecciones generales y convencido como está ya de que el PP las ganará, aunque no reeditará la mayoría absoluta actual, según las encuestas internas de Pedro Arriola, pero también según las externas.

Futuro de pactos y coaliciones

La encuesta del CIS publicada ayer ha terminado de dibujar un paisaje que ya se veía venir con el goteo de sondeos realizados para los medios de comunicación desde la entrada en tromba de Podemos en el Parlamento Europeo. A un año de nacer la formación de Pablo Iglesias, el bipartidismo PP-PSOE ha reventado y dejado un panorama futuro de ausencia de mayorías absolutas y presencia de pactos.

El Partido Popular ha recibido con alivio la encuesta del CIS, ya que, aunque sufre una considerable sangría de votos, mantiene su posición de liderazgo y, sobre todo, sigue siendo el único partido político que aglutina a la derecha española, desde las posiciones más ultras hasta el centro-derecha. El trasvase de votos que los analistas apuntan del PP hacia Ciudadanos, de momento, no constituye "una preocupación" para los de Rajoy, aunque se mantienen "vigilantes" ante el ascenso de la formación de Albert Rivera.

El sistema bipartidista actual es el único que garantiza "estabilidad y confianza exterior", según el PP

Sin embargo, los conservadores son conscientes de la necesidad que tendrán de conseguir apoyos si quieren gobernar, aunque sea en minoría. La mejor opción para Rajoy es lograr el respaldo del PSOE y garantizarse la "continuidad del sistema bipartidista actual", en opinión de los conservadores, "el único que garantiza estabilidad y confianza exterior" por la experiencia de gobierno de ambos. Ambas garantías son, confirman en el PP, los "cimientos" del programa electoral marco que está a punto de salir de la calle Génova para las andaluzas del 22 de marzo y el resto de autonómicas y municipales previstas para el 24 de mayo.

Ante un panorama futuro tan desdibujado, en el PP, lo único que tienen claro es que nunca pactarán con Podemos (ni Podemos con el PP). La pelota, pues, la dejan en el tejado de Pedro Sánchez, con quien esperan alcanzar más acuerdos de Estado en el año que queda de legislatura, algo para lo que el secretario general del PSOE también dijo estar dispuesto desde que aceptó firmar en Moncloa el cuarto pacto antiterrorista PP-PSOE de la democracia.