El secretario de Organización del PSOE, César Luena, ha querido ser claro y expeditivo después de que surgieran algunas dudas sobre qué iba a hacer con los expresidentes andaluces Manuel Chaves y José Antonio Griñán, a los que el Tribunal Supremo ha abierto una causa. Luena ha afirmado este viernes que pedirá a Chaves y

Griñán dejar sus respectivos escaños en el Congreso y el Senado si son imputados de delito por el Supremo y se les abre juicio oral por su posible relación con el caso de los ERE.

Luena, en declaraciones en Onda Cero, ha asegurado que su partido no se plantea tomar medidas disciplinarias por el hecho de que Chaves y Griñán comparezcan de forma voluntaria ante el Tribunal Supremo y que solo las adoptaría si se les imputa de actos delictivos.

'Si son, que yo no lo creo, imputados por un delito y se abre juicio, en ese caso se les pedirá que abandonen el escaño', ha explicado Luena ante la investigación que el Supremo va a llevar a cabo de parte del caso de los ERE, lo que también afecta a los diputados socialistas aforados José Antonio Viera y Gaspar Zarrías y a la senadora Mar Moreno.

Luena ha admitido que se podría cometer una injusticia si, tras ser imputados, se les levanta este cargo y son absueltos, pero ha opinado que en el actual contexto de corrupción en España, 'quizá sea mejor pecar por exceso que por defecto'.

'Es mejor para el debate público y el proceso judicial que abandonen las responsabilidades públicas', ha remarcado el 'número dos' del PSOE, quien ha opinado que ésta es también la postura de la presidenta andaluza, Susana Díaz.

A juicio del secretario de Organización socialista, su partido está dispuesto a actuar como quiere la mayoría de la sociedad española, con 'muchísima contundencia, rapidez y limpieza'.

La apertura de juicio oral acarrearía además que a los implicados se les suspendería de militancia de forma cautelar, ha recordado el dirigente socialista.