Público
Público

Diálogo Social Trabajo propondrá los ERTE como fórmula flexible para que empresas con problemas eviten cierres, despidos o bajada salarial

Será el primer planteamiento conjunto del Gobierno que se lleve a la mesa de la reforma laboral de este miércoles. Las propuestas sobre temporalidad, ultraactividad o la primacía de los convenios sectoriales aún se están perfilando en el Ejecutivo, que sigue trabajando discretamente con los agentes sociales para buscar un acuerdo.

Yolanda Díaz: ¿una forma-partido del mundo del trabajo?
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, en el pasado Congreso de CCOO. EFE

La reunión de este próximo miércoles sobre la reforma laboral estará centrada en la propuesta que llevará el Ministerio de Trabajo para que los ERTE se conviertan definitivamente en un modelo de flexibilidad interna de las empresas en momentos de dificultad, que evite tanto los cierres patronales, los despidos o las bajadas de salario a los trabajadores.

Aunque falta menos de mes y medio para acordar una reforma laboral y trasladarla a la Unión Europea, el Gobierno quiere ir paso a paso y cerrando los temas que, en principio, pueden tener más consenso con sindicatos y empresarios. De hecho, los seis acuerdos de prórroga de los ERTE se han firmado por todas las partes implicadas, por lo que parece el tema más fácil para lograr un primer consenso e ir avanzando.

La normativa específica para que las empresas se sumen a la fórmula de los ERTE, como se ha hecho durante la pandemia, es lo que falta todavía por concretar en detalle con los agentes sociales, donde hay diferentes propuestas, pero desde Trabajo se confía en llegar a un consenso con empresarios y sindicatos en este asunto.

La ministra de Trabajo , Yolanda Díaz, ya ha anunciado en varias ocasiones que la fórmula de aplicación de los ERTE "ha venido para quedarse", y está convencida de que puede ser una medida "para no dejar caer empresas y que no haya despidos masivos".

Negociaciones discretas

En cuanto al resto de cuestiones, de momento, el Gobierno está trabajando discretamente con los agentes sociales para llegar a la mesa de diálogo social con el acuerdo casi cerrado o, al menos, saber dónde llegan los desacuerdos y las línea rojas de cada parte. Pero las conversaciones son permanentes tanto internas como externas.

el clima de tensión en el Gobierno se ha relajado en los últimos días

Pero, además, el Gobierno también sigue trabajando internamente para presentar una propuesta conjunta, como se comprometió desde que la vicepresidenta económica del Gobierno, Nadia Calviño, decidiera tomar parte en estas negociaciones. Y aquí es donde se quiere que no aparezcan más discrepancias internas, por lo que la dos vicepresidentas (Calviño y Díaz) han bajado el tono en sus últimas declaraciones.

Según fuentes consultadas, hay posiciones más comunes en la prevalencia del contrato sectorial al de empresa y en la ultraactividad, pero persisten las diferencias en cómo abordar la temporalidad, un tema más que espinoso y que parece el más difícil de cerrar tanto en el propio seno del Ejecutivo, como con la postura que mantiene  la patronal.

No obstante, el clima de tensión en el Gobierno se ha relajado en los últimos días y se está negociando a varias bandas, con el objetivo de conseguir el acuerdo final antes de que acabe el año, que es imprescindible para seguir accediendo a las fondos europeos.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias