Pedro Sánchez (PSOE), presidente del Gobierno en funciones, acudió a Almería donde se encontró con el de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno (PP), en Níjar (Almería). Entre ambos, se cruzaron apenas unas palabras de saludo y mantuvieron, para evaluar las consecuencias del temporal, un encuentro de trabajo en el Ayuntamiento, junto a la alcaldesa, Esperanza Pérez, y la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera.

En paralelo a la visita del presidente, el PP prosiguió con la campaña de ataques permanentes a Sánchez en la que está inmerso a cuenta de cualquier tema, sobre todo de la financiación de Andalucía, un asunto para el que se pusieron a recoger firmas. El PSOE de Andalucía replicó que lo mejor que hacía Moreno era “ponerse a trabajar” en lugar de perder el tiempo con la confrontación. El mismo Moreno, poco antes de verse con Sánchez, le había reclamado fondos para hacer frente a los efectos de la gota fría.

Sánchez fue contundente en Almería. La "crisis" aún "no ha acabado”, dijo, para después pedir a los vecinos de las poblaciones afectadas que estén "muy pendientes de la información de todas las instituciones públicas" para evitar daños personales. Luego, remachó que el Gobierno no iba a "escatimar recursos" para la recuperación de los territorios.

"Ahora empieza la evaluación de los daños causados, que llevará unos días. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad de Estado y el Ejército continuarán desplegados para garantizar lo más importante, que es la seguridad de todos. España es un país solidario que estará con los vecinos afectados a través del Gobierno en cooperación con el resto de administraciones”, dijo el presidente.

Sanchez evitó confrontar con la Junta de Andalucía y manifestó, antes de recordar a los seis fallecidos, que “todas las instituciones públicas hemos hecho un trabajo sobresaliente”. “Creo que ha habido un nivel de cooperación interinstitucional muy importante y eso desgraciadamente no ha podido impedir el que haya habido pérdidas humanas”.

Sánchez cree que es factible una declaración de zona catastrófica en la Comunidad Valenciana y Región de Murcia, así como en la provincia de Almería, si bien ha instado a tener “paciencia” y esperar a evaluar los daños causados. "Vamos a esperar las próximas horas, a ver si pasa esta gota fría y podemos empezar la parte más importante, que es la de la recuperación".

En Níjar se han visto afectadas más de 1.300 hectáreas de cultivo al inicio de temporada. El presidente mostró su colaboración para recuperar las pérdidas "desde el punto de vista material, que no emocional" tanto de las cosechas como de las viviendas anegadas por las inundaciones.

Las delegaciones de Gobierno y las Subdelegaciones "ya han empezado a tramitar al menos la información de todos los ayuntamientos afectados" para evaluar los costes económicos de las inundaciones y riadas y poder actuar, ya sea de forma directa, ya sea a través de los gobiernos regionales, locales o de las diputaciones provinciales. "Hay mucho trabajo por hacer", apostilló.

Sánchez aterrizó en el Aeropuerto de Almería sobre las 10,30 horas, desde donde tomó un helicóptero y sobrevoló el campo de Níjar así como parte del término municipal de Almería, desde donde comprobó los efectos de la gota fría, especialmente en las zona de invernadero. Luego, tomó tierra de nuevo en el campo de fútbol de Níjar y se dirigió al Ayuntamiento de la localidad donde, además de con la alcaldesa y el presidente Moreno, se reunió con otros alcaldes afectados, el presidente de la Diputación de Almería, Javier Aureliano García, y responsables del operativo de emergencias.