Las últimas encuestas del año 2021 arrojan un escenario demoscópico en el que se consolidan la mayor parte de las tendencias que se venían observando en los últimos meses, concretamente desde el verano. Entre estas tendencias destaca, sobre todo, la pérdida de estimación de voto del PP, cuya caída se agudiza afectando a las formaciones políticas del bloque de derechas (especialmente a Vox, el gran beneficiado de esta situación).

Según el último estudio de Key Data para Público, los de Pablo Casado obtienen una estimación de voto del 26,4%, lo que le valdría alrededor de 113 escaños. El año 2021 comenzó mal para los conservadores desde el punto de vista demoscópico; aunque se mantenían por encima de sus resultados electorales de noviembre de 2019, apenas lograban recortar distancias con el PSOE y tenían un techo (alrededor del 23%) que no lograban romper.

Sin embargo, tras la victoria de Isabel Díaz Ayuso en las elecciones de la Comunidad de Madrid, en el mes de mayo, el PP rompió ese techo e invirtió su tendencia, sobrepasando a los socialistas y situándose en las encuestas por encima de los 120 escaños. En el verano se produjeron los primeros conflictos internos entre la presidenta madrileña y Pablo Casado, unos conflictos que se reflejaron en los barómetros.

Los conservadores comenzaron a caer y parecía que su tendencia al alza se iba a romper. Sin embargo, tras la celebración de la Convención Nacional del partido (en la que Ayuso y Casado trataron de escenificar unidad), recuperaron la senda del crecimiento, que nuevamente se invirtió cuando volvieron a aparecer las disputas internas entre ambos, en esta ocasión por hacerse con el control del PP de la Comunidad de Madrid.

Son ya varios los meses consecutivos de caída de un partido que agudiza su tendencia negativa en las encuestas al final del año. "La abierta lucha por el poder en el PP de Madrid les está costando a los populares la pérdida de la ventaja en las encuestas que obtuvieron tras las elecciones madrileñas del 4 de mayo. Llegan al cambio de año con una ligera ventaja de menos de un punto sobre el Partido Socialista", explica Paz Álvarez, directora técnica de Key Data.

También apunta Álvarez que el adelanto electoral de Castilla y León (que pondrá urnas el 13 de febrero de 2022) podría ayudar a zanjar estas disputas y le podría dar oxígeno a los conservadores en las encuestas: "Los procesos electorales suelen unir", añade.

El gran beneficiado 'silencioso' de esta caída es Vox. La formación de ultraderecha recoge las simpatías perdidas por el PP en los barómetros en un escenario demoscópico que desde hace algunos años limita los trasvases de voto al interior de los bloques ideológicos. Los de Santiago Abascal se mantienen por encima de sus resultados electorales, y su crecimiento, aunque lento y a costa del PP, no ha parado desde hace varios meses.

En este estudio Vox obtiene una estimación de voto del 17,1%, un porcentaje con el que rozarían los 60 escaños. "Vox es el gran beneficiado de la pérdida de votos del PP. Poco a poco va superando sus propios récords. Está dos puntos y siete escaños por encima de los resultados de las últimas elecciones generales celebradas hace poco más de dos años", comenta Álvarez.

Tampoco acaban mal el año los partidos que están en el Gobierno. Al PSOE le cuesta volver a recuperar el liderazgo en las encuestas que logró tras su victoria en las elecciones de noviembre de 2019 (una primera posición que perdió después de los comicios madrileños), pero aguanta bien, teniendo en cuenta que las formaciones que están en el Ejecutivo suelen sufrir más desgaste que las de la oposición.

Con una estimación de voto del 25,7% se sitúa a una distancia de menos de un punto del PP y estaría por encima de los 100 escaños. "La izquierda parece haber detenido el desgaste en intención de voto que produce el gobierno y se mantiene desde después del verano en torno al 26% de los votos válidos y supera los cien escaños", explica la directora técnica de Key Data.

También Unidas Podemos termina el año con buenas expectativas demoscópicas. El espacio confederal mantenía una tendencia negativa desde las elecciones de noviembre de 2019, y aunque al principio de 2020 logró crecer en algún mes puntual, se 'desangraba' lentamente con el paso del tiempo. Desde hace varios meses el partido crece, y aunque lo hace tímidamente y sigue por debajo de sus últimos resultados electorales, han logrado invertir la tendencia que arrastraban desde hace más de un año.

Unidas Podemos obtiene una estimación de voto del 11,1%, lo que le valdría alrededor de 30 escaños. Ciudadanos constata su profunda crisis y con una estimación del 3,1% sigue al borde de la desaparición en el Congreso de los Diputados y aspira, al menos en las encuestas, a obtener un solo diputado.

Por bloques, las derechas estarían por encima de los 170 escaños y el denominado bloque de la investidura (los partidos que actualmente sostienen al Gobierno de coalición en el Parlamento) sumaría alrededor de 155, dibujando un escenario de enorme inestabilidad política. "En todo caso, y siempre teniendo en cuenta que estamos lejos de una convocatoria electoral, estamos ante un parlamento muy complicado", concluye Álvarez.