El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, achaca la profunda remodelación de su Ejecutivo que ha tenido lugar en los últimos días a que "necesitábamos cargar las pilas para recuperar la economía". En una entrevista en Telecinco, el líder socialista no solo ha dado claves sobre la designación de los nuevos ministros, sino que también ha hablado, por vez primera, de las numerosas salidas que se han producido, con nombres y apellidos.

Sánchez ha hablado en concreto de dos de los dirigentes más cercanos que le han acompañado estos años: Carmen Calvo y José Luis Ábalos. Preguntado por el motivo que le ha llevado a cesar al exministro de Transportes (y también exsecretario de Organización del PSOE, cargo del que ha dimitido) y a la ex vicepresidenta primera, el presidente ha defendido que "los relevos se tienen que producir en todos los equipos, especialmente cuando se entra en una nueva fase", la fase de recuperación económica tras la pandemia del coronavirus.

"He tenido el mejor Gobierno para la mejor emergencia sanitaria, pero necesitábamos cargar las pilas y rejuvenecer" para afrontar la recuperación, ha explicado. Preguntado sobre Ábalos y su "enfado" por su salida imprevista del Ejecutivo, Sánchez ha dicho que "ha sido un muy buen ministro y un gran secretario de Organización, ha dejado al PSOE en una posición mucho más fuerte de la que ha tenido, pero estamos en una nueva etapa".

También ha alejado la posibilidad de situar a Calvo al frente del Consejo de Estado o de cualquier otra responsabilidad: "La actual presidenta del Consejo, María Teresa Fernández de la Vega, está haciendo un extraordinario trabajo y cuenta con mi confianza. Carmen Calvo ha querido trabajar como una diputada más y eso es algo que yo le agradezco profundamente", ha asegurado.

Respecto a la nueva estructura del Ejecutivo, el presidente ha puesto en valor la figura de Nadia Calviño, que ha asumido la Vicepresidencia Primera: "Es una mente económica privilegiada con una entrada en Europa que pocos tenemos, y es un lujo tenerla en el Gobierno. Además de ser vicepresidenta económica es la encargada de la transición digital, en un momento en el que el 28% de los fondos europeos van destinados a la digitalización".

Más allá de la remodelación del Gobierno, el líder del Ejecutivo también ha valorado la situación en Cuba, que ha achacado, entre otros factores, a la crisis de la covid y sus estragos en Latinoamérica: "Sin injerencias y con máximo respeto a la sociedad cubana, tenemos que pedir que se puedan manifestar libremente, acelerar las reformas que permitan la prosperidad y los derechos y libertades que disfrutamos los españoles".

"Es evidente que Cuba no es una democracia"

Preguntado por si Cuba es una dictadura, el presidente se ha mostrado contundente: "Es evidente que Cuba no es una democracia, no lo es, pero tiene que ser la sociedad cubana la que encuentre ese camino y la comunidad internacional tiene que ayudar", ha defendido.

También se ha referido Sánchez a su polémica con el ministro de Consumo, Alberto Garzón, a raíz de las recomendaciones de este último sobre las dietas saludables y sus advertencias sobre el consumo excesivo de carne. El presidente del Gobierno ha insistido en que "si hay un sector comprometido con la mitigación y adaptación al cambio climático es el sector del campo, el agroalimentario, que es muy consciente de que tenemos que modernizar el sector del campo".

Aunque ha reconocido que sus declaraciones sobre "el chuletón al punto" "han generado polvareda", ha querido mandar un recado al ministro de Consumo: "Lo que no puede hacer un Gobierno progresista es regañar a la ciudadanía, sino acompañar la transformación de este sector. Ese es el mensaje que tenemos que trasladar al sector de la agroalimentación y al conjunto de la ciudadanía. Tenemos que inducir a nuestros jóvenes a comer saludable, pero no regañándolos".