MADRID.-Podemos siempre ha insistido en la necesidad de mirar con "prudencia" y "cautela" las encuestas, también las propias. Pero también ha dejado claro que los sondeos marcan una tendencia clara al cambio político, aunque no siempre sean leídas de esta forma. Según la encuesta hecha pública este lunes por la formación, el Partido Popular ganaría las elecciones del 20-D con entre un 27% y un 29% de los votos, pero no se produciría el sorpasso de Ciudadanos a Podemos que vaticinaba un reciente sondeo de Metroscopia para El País, sino que PSOE, Podemos y Ciudadanos (C's) competerían por el tercer lugar con entre un 19% y un 21% de los votos. 

En intención directa de voto, y según la encuesta dada a conocer este lunes a través de una carta de Secretaría de Análisis Político a los inscritos, el PP iría en primer lugar con un 20% de los apoyos, seguido por Podemos y PSOE, con un 15%, e inmediatamente después iría Ciudadanos, con un 14% de los votos. 

Bescansa: "No dejemos que los de siempre dobleguen nuestro ánimo con datos poco confiables e interpretaciones tendenciosas"

Carolina Bescansa, secretaria de Análisis Político y Social y responsable de Programa, explica en esta misiva que el crecimiento de C'S "se explica mayoritariamente en los 16-18 puntos porcentuales perdidos por el PP", y asegura que esta "nueva derecha" posee menos capacidad para atraer antiguos votantes del PSOE -el target de Podemos- y resulta menos atractiva para los jóvenes que votarán por primera vez en diciembre.

"Aunque Podemos está situado inmediatamente detrás del PP, en posición de empate técnico con PSOE y C'S, todavía no estamos en condiciones de poner en marcha un Gobierno propio en España", asegura la misiva remitida por la número tres del partido y su equipo a la militancia. 

Bescansa asegura que la "estrategia del régimen" frente "al cambio" es hoy "menos burda", y pasa por situarles "en la esquina de las izquierdas", invisibilizar la "potencia transformadora" de su proyecto y sostener que la única vía de cambio es la sustituir las siglas del PP por las de Ciudadanos. "Pues bien, ni nuestros datos ni los indicadores indirectos que el CIS no tiene más remedio que publicar dicen eso", afirma la analista electoral, que cierra su carta asegurando que esta vez "es posible ganar". "No dejemos que los de siempre dobleguen nuestro ánimo con datos poco confiables e interpretaciones tendenciosas", zanja.

La encuesta, desarrollada entre el 10 y el 24 de septiembre -antes de las elecciones catalanas y del sondeo de Metroscopia, al inicio de octubre- se basa en 1.783 entrevistas telefónicas, y tiene un margen de error del 2,4%. También vaticina un mal resultado para IU, que en intención directa de voto apenas se haría con el 2% de los apoyos, aunque la número tres del partido advierte que hay que tomar esta estimación "con máxima reserva, dadas las dificultades históricas para estimar el voto a IU".  

La carta remitida por Bescansa , titulada Carta informe sobre la encuesta preelectoral realizada por Podemos en septiembre de 2015 aclara que el trabajo ha sido financiado por los inscritos -aunque no especifica cuánto ha costado- e incluye también datos sobre la percepción de la evolución de la situación económica durante los últimos meses, o sobre los efectos de las medidas económicas adoptadas por el Gobierno de Mariano Rajoy. Un 57% de los encuestados cree además que la apertura de un proceso constituyente es la mejor vía para resolver los grandes problemas del país, y hasta un 52% concuerdan con la afirmación "Es imposible que nos saquen de la crisis los mismos que nos metieron en ella".

Este lunes, la secretaria de Coordinación entre Áreas de Podemos, Irene Montero, era la primera integrante de la Ejecutiva en dar a conocer los resultados del sondeo en una entrevista radiofónica en La Cafetera, al inicio de una semana clave para el partido.

Con la vista puesta en la presentación de su programa electoral a finales de mes, -el plazo para aportar propuestas se cierra este lunes- la formación del círculo ultima las distintas alianzas territoriales con las que concurrirá al 20-D, consciente de que el 6 de noviembre es la fecha máxima legal para registrar alianzas y pactos de cara a las generales, marcadas en rojo en el calendario de Podemos.