ZARAGOZA.- Podemos mantendrá en Aragón una postura de oposición en la que, además de controlar la gestión del Gobierno de Javier Lambán, prevé presentar a debate su programa político mediante proposiciones de ley. Una de las primeras será la de cuentas abiertas, con la que pretende que cualquier ciudadano pueda ver los movimientos de las cuentas corrientes de la comunidad autónoma.

Pablo Echenique, que anuncia que no será candidato de Podemos en las próximas elecciones generales –“mi compromiso está aquí, con la ciudadanía aragonesa”-, reclama al PSOE que cumpla sus acuerdos y le pide que vuelva a sus principios fundacionales. Apuesta abiertamente por aplicar medidas de transparencia en la Administración autonómica y aboga por reformar la figura del Justicia –un defensor del pueblo de origen medieval- para que sus informes sean vinculantes.

Una vez investido Javier Lambán como presidente, comienza una legislatura en la que Podemos decide no entrar en el Gobierno ¿Cuál va a ser su posición?

Nosotros somos oposición. Somos una fuerza que ha descartado pactos a la vieja usanza. No hemos pedido nada para nuestros diputados o nuestro partido, sino diez medidas de cambio real que supongan un giro con respecto a las políticas que se venían haciendo. El PSOE, tras un tira y afloja, las ha aceptado en su mayoría con pequeños retoques y en otros casos hemos llegado a un punto medio. Con eso entendimos que se podía hablar de investidura. Como numéricamente no nos salen las cuentas para un Gobierno de Podemos, que creemos que era la mejor alternativa, por responsabilidad, y para evitar que hubiera un Gobierno del PP o nuevas elecciones, decidimos quedarnos en la oposición de una manera crítica y firme pero también responsable. No tendremos problemas para apoyar leyes que mejoren la vida de la gente, pero nos opondremos a medidas que defiendan intereses privados.

¿Cómo evalúa la coincidencia programática entre Podemos y el PSOE?

Yo diría que, basándose únicamente en el texto escrito [del decálogo], la coincidencia parece amplia. Pero el problema es que el PSOE no ha demostrado todavía que tenga voluntad de cumplir la palabra dada. La coincidencia en los hechos está por ver, y el PSOE ha hecho en los últimos años cosas diferentes a las que venían en su programa o a lo que se había comprometido. Estamos esperando a ver si se cumplen los acuerdos.

"Entendemos que nuestro decálogo es un contrato con el PSOE, y habrá que cumplirlo"

¿Cree que los acuerdos del PSOE con CHA y con IU pueden afectar al cumplimiento del decálogo que ha firmado con su partido?

No me consta. Entiendo que son compatibles. En general se trata de declaraciones de intenciones, no de medidas con números y plazos. En ese sentido, es más fácil compatibilizarlos con nuestras medidas. Entendemos que nuestro decálogo es un contrato con el PSOE, y habrá que cumplirlo.

Hay una mayoría improbable en la cámara entre PP y Podemos, que suman 35 de los 67 escaños. ¿Temen el efecto mediático de que eso, si se da, se presente como una pinza?

La verdad es que no. Votaremos a favor de leyes que entendamos que estén bien, pero nuestra distancia con el PP es tan abismal que esa coincidencia se dará pocas veces. Podemos no dejará de apoyar una ley razonable porque la presente el PP, pero eso no será habitual. Estamos bastante lejos ideológicamente.

¿Qué espera del Gobierno de Lambán?

Espero que cumpla aquello lo que se ha comprometido y que quiera y pueda acercarse un poco a los principios fundacionales de su partido, de los que tanto se han alejado. Sería bueno para toda la ciudadanía que el PSOE empezara a hacer lo que dice que va a hacer.

"Podemos no dejará de apoyar una ley razonable porque la presente el PP, pero eso no será habitual. Estamos bastante lejos ideológicamente"

¿Puede haber cambios en la posición de Podemos en las Cortes de Aragón tras las elecciones generales o la decisión de permanecer en la oposición es definitiva?

No hay planes de modificar nuestra postura. Nuestro plan es seguir siendo una fuerza de oposición contundente y firme en todo momento. No vemos motivos ahora para entrar en un Gobierno del PSOE y no creo que el panorama cambie de una manera sustancial.

Usted fue candidato en las europeas y cabeza de lista en las autonómicas ¿Pablo Echenique irá en la lista de las generales?

En estos momentos mi compromiso está aquí, con la ciudadanía aragonesa. No entra en mis planes más que hacer una oposición dura aquí.

Los diputados de Podemos, salvo usted, no tienen experiencia parlamentaria. ¿Eso es un hándicap o una oportunidad de refrescar la institución?

Primero hay que aprender, pero también es verdad que aprendemos rápido. En el Parlamento Europeo nos pusimos rápido a trabajar y no me cabe duda de que aquí va a pasar lo mismo. Además, no tenemos deudas, ni mochilas que nos hagan pensar en qué dirá tal banco o tal lobby. Tenemos agilidad para trabajar sin ataduras. En este caso, ser nuevos es una ventaja.

"En estos momentos mi compromiso está aquí, con la ciudadanía aragonesa. No entra en mis planes más que hacer una oposición dura aquí"

¿Tienen cuantificados los recursos necesarios para desarrollar el decálogo?

La mayoría de las medidas son gratis. Lo hemos diseñado así al entender que iba a haber problemas presupuestarios porque Rudi ha dejado la comunidad en una situación penosa, ha duplicado la deuda pública, ha dejado pagos pendientes. Alguna medida es recaudatoria, como el impuesto a las grandes hidroeléctricas. No hemos sumado la totalidad de los costes y recaudaciones de las medidas, pero me atrevería a decir que el saldo es favorable, que se recauda más que se ingresa.

¿Cuál va a ser la primera iniciativa legislativa de Podemos?

Está bastante trabajada jurídicamente, la ley de cuentas abiertas, para que cualquier ciudadano pueda ver cómo están las cuentas bancarias de la DGA, cuánto dinero hay en ellas y los movimientos. Es algo muy razonable. La transparencia es una de las mejores vacunas contra la corrupción, y a priori no vemos motivos para que las cuentas en las que está el dinero de todos no sean visibles. Será una de nuestras primeras proposiciones de ley.

Parece difícil que alguien vaya a oponerse a una medida de ese tipo.

"Rudi ha dejado la comunidad en una situación penosa, ha duplicado la deuda pública y con pagos pendientes"

En general, planteamos medidas a las que es difícil que el resto de fuerzas se oponga.

En el decálogo llama la atención una medida como el control previo de los proyectos a los que la Administración va a destinar fondos. ¿Cómo lo plantean?

Habría que definir los mecanismos. Entendemos que la corrupción no solo ocurre cuando alguien mete la mano en el bote. Hay otras formas de utilización de lo público que resultan perniciosas y no están justificadas, como la inversión en proyectos sin rentabilidad para los aragoneses o para el territorio pero que benefician a grupos empresariales. Eso debería saberse. No solo los ilícitos deben ser mirados con lupa.

Ustedes proponen también una oficina anticorrupción cuyos miembros sean elegidos por las Cortes. ¿De qué perfiles se trataría?

Debería haber miembros de la judicatura, sin duda, y también técnicos y personal de la Administración. Y también de movimientos sociales que han estado mirando con lupa, dentro de sus posibilidades, las cuentas públicas, como Attack o la Plataforma por una Auditoría Ciudadana de la Deuda. Tienen economistas que con su tiempo libre han intentado desenmascarar las cuentas públicas y el velo de opacidad que a veces hay sobre ellas. Un perfil mixto sería lo ideal.

"Promoveremos una ley de cuentas abiertas para que cualquier ciudadano pueda ver cómo están las cuentas bancarias de la DGA, cuánto dinero hay en ellas y los movimientos"

¿Ve posible internalizar los servicios informativos de la televisión autonómica?

A final, a propuesta del PSOE, hemos acordado hacer un estudio. El Gobierno de Rudi adjudicó deprisa y corriendo algunos contratos como el de los servicios informativos. Este tipo de contratos suele tener cláusulas indemnizatorias altas. Hay que analizarlos, pero con voluntad de llegar a un punto medio acordamos realizar un estudio para internalizarlos cuando el contrato expire. Estamos convencidos de que eso sería beneficioso para la comunidad autónoma. Cuando alguien contrata un servicio está pagando IVA y beneficio industrial: estamos hablando de un sobrecoste del 30% sin hacer nada. Por lo tanto, todo lo que el Estado tiene capacidad para hacer por sí mismo, le sale más barato. Sería muy raro que costara más hacer los servicios informativos en la casa que fuera.

Los grupos parlamentarios no han logrado ponerse de acuerdo para renovar al Justicia, a cuyo frente lleva ya 16 años Fernando García Vicente. ¿Qué planteáis sobre la figura del Justicia y para resolver ese atasco?

Una figura como el Justicia es muy interesante. Su sentido es defender a la ciudadanía de las tropelías que pueden cometer los poderes públicos, pero somos conscientes de que la institución necesita una renovación. Sus informes deberían ser más vinculantes de lo que son. Una institución independiente que defiende los derechos de la ciudadanía y que en sus informes sugiere hacer las cosas de otra forma tiene poca utilidad si ese informe acaba en la papelera. Habría que modernizar la institución para que sea lo más independiente posible y para dar un carácter más vinculante a sus informes.