MADRID.- Tres meses ha tardado Cristina Cifuentes, delegada del Gobierno en Madrid, en negar la participación de ningún miembro del grupo Bukaneros en la macroreyerta en Madrid Río el pasado 30 de noviembre en la que fue asesinado el ultra del Deportivo Jimmy a manos de varios miembros del Frente Atlético.

Ese día, la Jefatura Superior de la Policía de Madrid informó de que miembros del grupo ultra del Rayo Vallecano habían acudido a las inmediaciones del Vicente Calderón para participar en la pelea entre ultras de los Riazor Blues y del Frente Atlético. Además, se informó de que se habían detenido a 21 personas, entre ellas dos pertenecientes a Bukaneros. Los medios de comunicación informaron de estos detalles, entre ellos Público.es.

Cifuentes: "Es verdad que cuando ocurrió la reyerta en un principio decían que si los Bukaneros tenían algo que ver. A mí nunca me ha constado, como responsable policial"

Sin embargo, este miércoles en un encuentro con estudiantes en Vallecas Cifuentes negó la mayor y reconoció estar "segura que los Bukaneros no tuvieron nada que ver en la pelea". Es más, la delegada del Gobierno culpaba a los medios de comunicación y a las redes sociales y se hacía la sorprendida al ser preguntada al respecto: "Es verdad que cuando ocurrió la reyerta en un principio decían que si los Bukaneros tenían algo que ver. A mí nunca me ha constado, como responsable policial, que los Bukaneros tuvieran nada que ver y que yo sepa a día de hoy no hay ningún Bukanero detenido. De todas formas, es un juez el que ha decidido a qué se detiene y a quién no y quien sigue en prisión y quien no", llegaba a asegurar.

Y pese al acoso policial que ha impuesto Cifuentes en las últimas jornadas a Bukaneros, con registro de su local sin tener una orden judicial incluído, ayer aleccionaba a los presentes en su charla, pidiéndoles que no debían criminalizar a los grupos de aficionados de los equipos de fútbol: "No se puede criminalizar a todas las aficiones y desde luego la afición del Rayo exactamente igual. El problema es cuando en las aficiones de los equipos de fútbol, hay algunos elementos que son absolutamente radicales. No vamos a criminalizar ni a los equipos ni a las aficiones porque estos son comportamientos muy aislados y personales".

El Rayo: "Nos ilusiona y enorgulluce saber que tras las recientes informaciones y declaraciones recibidas en el club en el día de hoy, no hay indicios de que hubiera ningún rayista implicado en los tristes acontecimientos de Madrid Río"

Tras conocer estas declaraciones, el Rayo Vallecano publicó un tuit de madrugada en su cuenta oficial en la que se alegraba de que se hubiera constatado de que ningún aficionado rayista había estado implicado en la pelea de Madrid Río. "Desde el Rayo Vallecano de Madrid nos ilusiona y enorgulluce saber que tras las recientes informaciones y declaraciones recibidas en el club en el día de hoy, no hay indicios de que hubiera ningún rayista implicado en los tristes acontecimientos de Madrid Río", escribió el club en su cuenta de Twitter.

La aclaración del club madrileño tuvo su reacción en el grupo Bukaneros, que siempre había negado la participación "ni colectiva ni individual" en la reyerta. "Nos hubiera gustado que nuestra palabra fuera suficiente. Tres meses ha tardado el club en darse cuenta de quién mentía", escribieron los Bukaneros, al conocer la noticia, a través de su cuenta oficial en Twitter.

Presión policial sobre Bukaneros

La noticia coincide en el tiempo con un momento de especial acoso al grupo rayista, que en las últimas jornadas de Liga disputadas en el estadio de Vallecas ha sufrido una excesiva presión policial, fruto de lo que consideran un "uso ideológico" de la Policía por parte de Cifuentes. El punto culmen se produjo el pasado sábado antes del encuentro entre el Rayo y el Levante, cuando agentes policiales irrumpieron en el local de Bukaneros, identificó a 184 personas que se encontraban en su interior y se incautó de más de 400 bengalas.

Víctor, uno de sus miembros, relata a Público cómo sucedió el registro y que a la hora de pedir a los agentes la pertinente autorización judicial la respuesta de uno de los policiales al mando fue: "Ni orden ni nada, si tenéis algún problema podéis poner una denuncia".