MADRID.- La rueda de prensa del número tres de Podemos, Juan Carlos Monedero, convocada para las 13.30 de hoy se ha retrasado más de una hora por la irrupción de un alborotador, el conocido como EL "camarero del 25-S", que finalmente ha sido desalojado a rastras por la Policía.

Alberto Casillas, quien saltó a la fama por proteger a unos manifestantes de los antidisturbios en la jornada de protesta del 25 de septiembre de 2012 (Ocupa el Congreso), ha provocado un incidente en la sala en la que Monedero ha convocado a los medios para informar de su situación fiscal. 

Ese incidente ha hecho que los miembros de Podemos hayan retrasado la comparecencia "por motivos de seguridad" y hayan avisado a la Policía, que se ha presentado en una sala abarrotada de medios de comunicación.

Alberto Casillas, con los agentes de policía de paisano. E.P.

Casillas (que ya había increpado al líder de Podemos, Pablo Iglesias, durante un desayuno informativo en junio por su relación con el Gobierno venezolano) ha increpado a gritos a varias de las personas del gabinete de prensa de Podemos, tras explicar que le habían avisado de que iban a llamar a la Policía. "¿Qué delito he cometido para llamar a la Policía?, ha gritado tras descalificar a los organizadores con insultos como "sinvergüenza" o "golfo".

"No vengo a sabotear, vengo a oír ¿Por qué van a llamar a la Policía?", ha denunciado. Minutos después, el camarero se ha calmado, si bien se ha negado a abandonar el espacio. El profesor Jorge Verstrynge, ex secretario general de Alianza Popular y actual colaborador de Podemos -aunque sin ningún cargo orgánico-- ha sido una de las personas que ha tratado de dialogar con él.

Posteriormente, se personaron en el local una pareja de policías de paisano, a los que Casillas les dijo que él no había hecho nada, tirándose al suelo. "O me llevan detenido o no me voy", les dijo. Cuando los policías han intentado levantarlo ha empezado a gritar: "no me toquen, no me toquen, me duele el brazo".

Finalmente, Alberto Casillas ha abandonado el local sin que estuviera esposado, acompañado por cuatro agentes, dos uniformados y otros dos que vestían de paisano.