Podemos aspira a rearmarse este domingo en las elecciones europeas. Tanto Irene Montero, su candidata, como el resto de activos políticos que han participado en el acto de cierre de campaña, que ha tenido lugar en la plaza de Pedro Zerolo ―en el madrileño barrio de Chueca―, han apelado a la emoción y al optimismo para acudir a las urnas este 9 de junio. En la línea que viene marcando la formación morada desde el principio de la campaña electoral, Palestina ha sido el tema central de los discursos. "La tarea más urgente es parar el genocidio en Palestina", ha clamado Montero.

"Hemos vuelto a pensar que sí se puede". Ione Belarra, la secretaria general del partido y portavoz en el Congreso de los Diputados, ha verbalizado la sensación que recorría la plaza. Lograr los dos escaños que dan las encuestas a Podemos es importantes para ellos. Solo les daban solo uno al principio de la campaña.

En la formación, tienen la sensación de que un resultado como el que esbozan los sondeos es positivo después de la pérdida de peso que ha experimentado en las últimas citas electorales, agravado con la aparición de Sumar, con quienes rompieron en el Congreso de los Diputados debido a las desavenencias dentro del grupo parlamentario.

El primero en hablar este viernes ha sido Pablo Iglesias, que ha parafraseado a Rafael Alberti: "¡A galopar hasta enterrarlos en el mar!". El exvicepresidente del Gobierno y fundador de Podemos ha animado a su militancia, poblada de banderas moradas, republicanas, palestinas y LGTBIQ+, a "galopar" hasta las urnas. "Se palpa la emoción", ha deslizado Iglesias. "El mayor patrimonio de la izquierda es la ética". Gritos de "sí, se puede".

Después, han intervenido la activista trans Mar Cambrollé, que ha agradecido a Irene Montero su lucha por los derechos del colectivo; Serigne Mbayé, que ha rechazado los "muros" que "quieren poner" entre la población para "enfrentarla"; o María Teresa Pérez, quien fuera directora general de Injuve, que ha recorrido una por una las luchas en las que los morados consideran que el PSOE es incoherente. Entre otras cosas, Pérez ha señalado que "reconocen el Estado de Palestina, pero no rompen relaciones con Israel" o que no luchan contra el lawfare. "La ultraderecha crece porque la socialdemocracia está acobardada", ha abrochado la número cinco en la lista electoral.

Irene Montero: "Me niego a resignarme"

Las últimas en intervenir en esta calurosa y nublada ―casi lluviosa― tarde de junio han sido Isa Serra, número dos en la lista, Ione Belarra e Irene Montero. El elemento común en los discursos de las tres ha sido dibujar a Podemos como el partido que garantiza una posición clara con respecto a Palestina. "Gracias Irene Montero e Ione Belarra por decir que [la actuación de Israel] no era legítima defensa". "Solamente hubo una voz", ha resumido Serra. "No queremos más balas, queremos más escuelas y más residencias", ha lanzado Pablo Fernández, también sobre la tarima.

Irene Montero ha definido la candidatura de Podemos como "la que no guarda el silencio cómplice con los poderosos y las desigualdades".

También ha arremetido muy duramente contra el ministro de Exteriores español, José Manuel Albares. "Un ministro de mi país no puede decir que somos neutrales. España no es neutral. España está con el pueblo palestino", ha insistido la candidata, que, en otro orden de cosas, ha reivindicado la lucha LGTBIQ+ desde el centro de una de las plazas más emblemáticas del colectivo.

Han sido esa defensa del pueblo palestino y las críticas al Partido Socialista los dos ejes que han vertebrado el acto. "PP y PSOE hacen la misma campaña consenso bélico y de aumento del gasto militar", ha resumido montero. En ningún momento de la tarde, en cambio, se ha mencionado a Sumar, que, al mismo tiempo, se encontraba celebrando su acto de cierre de campaña en el País Valencià.

Podemos se consagra a Irene Montero, su principal activo político, para dar la sorpresa el 9 de junio. "Me niego a resignarme", ha remachado la candidata. Este domingo, a partir de las 23 horas, cuando se sabrán los resultados, se podrá valorar hasta qué punto el partido ha conseguido activar a sus votantes.