La ANC ha asegurado que la entidad está dispuesta a "dar cobertura" a eventuales acciones de desobediencia civil si son necesarias en caso de una victoria de los partidos soberanistas en el 27S y un bloqueo por parte del Estado.

En declaraciones a Catalunya Ràdio ha explicado: "La ANC tendrá que ser un canal de movilización también en momentos donde pueda dar una cobertura a la ciudadanía en procesos que, seguro que en algún momento u otro viviremos, por ejemplo de desobediencia social".

Ha asegurado que "no ha habido movimiento social grande que haya planteado desafíos importantes al 'status quo', que haya ganado estos desafíos sin plantear la desobediencia", y ha afirmado que la ANC estará preparada para proponer eventuales acciones de desobediencia si son necesarias.

Ha puesto como ejemplo de desobediencia civil tributar los impuestos en una Agencia Tributaria catalana: "Este será un acto de soberanía que este país tendrá que hacer en algún momento de su trayecto hacia la independencia".

Por su parte, el presidente de Òmnium Cultural, Quim Torra, ha afirmado que tras años de proceso soberanista "quizá las manifestaciones que sean necesario hacer a partir de ahora sean de otro tipo, pero no por la Diada".

Mas considera un "error monumental" creer que la independencia está asegurada

El presidente de la Generalitat y número 4 de Junts pel sí, Artur Mas, ha descartado que la manifestación independentista de la Diada asegure una victoria secesionista el 27S: "Algunos pueden creer que después de la Meridiana esto ya está hecho, y sería un error monumental". "Sin una gran concentración como la de la Meridiana y las que ha habido hasta ahora, no estaríamos donde estamos, pero sólo con esto no llegaremos adonde debemos llegar", ha dicho este sábado en un acto en el centro cooperativo TEB Sant Andreu, en Barcelona, junto al candidato por Lleida, Josep Maria Forné, y a los religiosos Pare Manel --suplente por Barcelona-- y Maria Victòria Molins.

Mas ha pedido traducir en las urnas el clamor de la manifestación, y "fuera de lugar y chapucero" que la interpreten como un acto electoral de Junts pel sí. "Que lo diga gente que luego dice que está a favor del derecho a decidir ya no vale", ha declarado. También ha rehusado descartar el discurso social del soberanista, y ha aseverado que uno de los fines del independentismo es construir un país mejor: "No hay dos proyectos, el social y el nacional; todo va en el mismo tren y en la misma dirección, y tenemos que procurar que no caiga en vía muerta".

Arropado por miembros destacados de CDC y del tercer sector, ha aseverado que el autogobierno catalán "es menor en cuantía y de peor calidad" que hace cuatro años, lo que limita la capacidad que tiene la Generalitat de reaccionar ante emergencias sociales, y ha puesto el decreto de pobreza energética --recurrido por el Gobierno central y suspendido sine die por el Tribunal Constitucional-- como ejemplo. "Si nuestra autonomía no da ni para esto es que no es la autonomía que necesitamos", ha zanjado.