La Audiencia de Álava ha condenado a tres años de cárcel y a una multa de 12.960 euros a un hombre que abusó sexualmente de ocho mujeres, cuatro de ellas menores, a quienes abordaba por la calle en Vitoria. El condenado preguntaba a las víctimas por una dirección en la capital alavesa y cuando iban a ayudarle las tocaba y restregaba sus genitales contra ellas.

El juicio por estos hechos se ha celebrado hoy en la Audiencia provincial de Álava y la Fiscalía y la defensa han llegado a un acuerdo de conformidad que ha sido ratificado por el acusado, que ha reconocido los hechos y ha aceptado las penas. A partir de ahora el tribunal dictará sentencia en base a este acuerdo de conformidad, que también establece que si el acusado no abona la multa impuesta la pena de cárcel se incrementaría hasta los cuatro años y medio.

Además, la sentencia que se dictará incluye también que el condenado será expulsado de España cuando finalice el cumplimiento de la pena de cárcel y establece que el hombre deberá abonar asimismo 2.500 euros en concepto de responsabilidad civil por el daño causado a las víctimas. El abogado de la defensa ha explicado que cuando se ejecute la sentencia solicitará que no se haga efectiva la expulsión del territorio del condenado ya que el hombre tiene arraigo familiar en España.

Según la Fiscalía, los hechos, reconocidos por el condenado, ocurrieron entre julio y noviembre de 2016 en distintos lugares de la capital alavesa por donde el procesado, que está en situación legal en España, circulaba siempre en bicicleta. El primer abuso sexual tuvo lugar el 22 de julio de 2016 cuando el hombre, que en esa ocasión iba andando y empujaba su bicicleta, se cruzó en el camino de una mujer de forma que la obligó a pararse.

En ese momento le preguntó por la calle Madrid y le mostró en su teléfono móvil una aplicación GPS para que le marcara la ubicación. La señora se sintió incómoda y trató de marcharse diciéndole que preguntara a otras personas, pero él se negó, se colocó detrás de ella, la abrazó y restregó sus genitales contra ella, aunque finalmente la víctima logró marcharse. Lo mismo ocurrió el 31 de julio de 2016 con otra mujer, y en agosto volvió a repetir el mismo "modus operandi" con una chica de 16 años que pudo también abandonar el lugar.

El 25 de septiembre hizo exactamente igual con otra señora y el 7 de octubre con una adolescente de 15 años. Un día más tarde se acercó a otra mujer con la misma intención y el 25 de octubre repitió el mismo proceder con otra menor, de 16 años, a la que llegó a acorralar contra una valla. Por último, el 26 de noviembre localizó a otra chica de 16 años de madrugada cuando ella iba a acceder con su bici al portal de su casa.

Antes del acuerdo de conformidad la Fiscalía pedía penas por ocho delitos de abuso sexual que oscilaban entre los 20 meses de prisión y los 4 años de cárcel, que sumaban un total de 17 años. No obstante, el Ministerio Público reclamaba que se sustituyera la pena de prisión por su expulsión del país y que se le prohibiera entrar a España en 10 años