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Las víctimas viajan a Utoya para superar el horror

Medida para que los familiares superen psicológicamente la tragedia

 

AGENCIAS

Los familiares y allegados de las víctimas de la matanza de Utoya tuvieron la oportunidad de visitar la isla en la que el ultraderechista Anders Breivik acabó con 69 personas, la mayoría pertenecientes a las juventudes del Partido Laborista noruego.

Unas 1.500 tienen previsto visitar la isla este fin de semana. El primer grupo de 500 familiares llegó en barca a la isla bajo una fina lluvia. Allí, los agentes de policía les explicaron exactamente dónde murieron sus allegados. También estaban acompañados por psicólogos y religiosos para ofrecerles apoyo.

Breivik dice que se aburre en la cárcel, a la que considera una 'tortura sádica'

'Ir a la isla les ayuda a comprender lo que sucedió. Les ayuda a hacerlo real porque hasta que ahora lo podían sentir como algo irreal', explicó a Reuters el psicólogo Atle Dyregrov, que se ha encargado de coordinar el apoyo psicológico para víctimas y familiares.

'Ver lo que sucedió en realidad suele ser menos terrorífico que las fantasías que uno crea. Esas fantasías te pueden devorar por dentro', afirmó Dyregrov.

La visita coincidió con la petición de la Policía noruega de mantener el aislamiento contra Breivik mientras continúa la investigación.

El juez extiende el aislamiento para el ultraderechista asesino noruego

La petición fue atendida por el juez Hugo Abelseth que informó que Breivik seguirá bajo aislamiento durante al menos cuatro semanas más. 'El acusado describe el aislamiento como algo aburrido y monótono y un sádico método de tortura', dijo el juez Abelseth.

Un abogado de las víctimas afirmó que tras la segunda comparecencia de Breivik ante el juez, el acusado de matar a 69 personas en Utoya y otras ocho con un coche bomba en el centro de Oslo, no mostró arrepentimiento. 'No tiene ningún sentimiento por el daño y el sufrimiento que ha causado', dijo Sigurd Klomset.

Según los documentos difundidos por el tribunal, el asesino había solicitado al tribunal vestir con un frac blanco 'para demostrar al tribunal que se toma muy en serio el proceso judicial contra él'. Su petición fue rechazada por el juez al tratarse de algo 'innecesariamente molesto y ofensivo'.

La policía noruega difundió el jueves las transcripciones de las dos llamadas de Breivik desde la isla. En la primera se identifica a sí mismo como 'comandante del movimiento noruego de resistencia anticomunista' y expresa su deseo de 'rendirse' antes de que se interrumpa la conversación. En la segunda dice: 'he completado la operación'.

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