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La UE cierra legislatura con su primera ley contra la violencia de género sin incluir la violación como eurodelito

La directiva, que se vota el miércoles, penaliza la mutilación genital femenina, los matrimonios forzosos o califica por primera vez el acoso en la red como un crimen en la UE.

Un grupo de mujeres durante la manifestación del 8M de 2024 en París.
Un grupo de mujeres durante la manifestación del 8M de 2024 en París. Teresa Suárez / EFE

No es ideal, pero es un punto de partida imprescindible. Es la sensación que impera en la Eurocámara a escasas horas de que el Pleno de Estrasburgo apruebe la que será la primera ley de la UE para luchar contra la violencia de género. La directiva, que penaliza la mutilación genital femenina o los matrimonios forzosos, saldrá adelante con abultada mayoría, pero genera sentimientos encontrados en buena parte del arco parlamentario porque se ha quedado a medio camino después de que Francia y Alemania hayan impedido que se tipifique la violación como delito en toda la UE.

"Esta ha sido la legislatura de las mujeres (...) Dejamos una Europa más feminista que acabará dando sus frutos. Esta ley cambiará la vida de millones de víctimas, frenará el negacionismo de género e impedirá las regresiones con los que algunos sueñan", ha celebrado la eurodiputada María Eugenia Rodríguez Palop, de la Izquierda, en el debate previo a la votación que los eurodiputados celebrarán el miércoles para rubricar la primera directiva europea contra la violencia a las mujeres.

El Convenio de Estambul eleva la violencia de género a categoría de eurodelito 

Durante este ciclo legislativo que tocará fin con las elecciones europeas de junio, el bloque comunitario ha ratificado el Convenio de Estambul, que ha elevado la violencia de género a categoría de eurodelito y ha incluido el aborto en la carta de derechos fundamentales. Pero no ha sido posible blindar el consentimiento y homologar el delito de violación en los 27 Estados miembros a pesar de que la propia presidenta de la Comisión Europea, la democristiana alemana Ursula von der Leyen, así lo defendió en su último discurso sobre el estado de la Unión. "La verdadera igualdad no podrá existir hasta que no desterremos la violencia. Desearía que consagrásemos en la legislación otro principio fundamental: no es no", afirmó desde el estrado de Estrasburgo.

La estandarización del delito de violación en todos los países europeos ha sido el gran eje de discordia en las negociaciones de más de dos años que han llevado a cabo el Parlamento y el Consejo. Finalmente, en la recta final, Alemania, en manos del socialdemócrata Olaf Scholz, Francia, bajo el liberal Emmanuel Macron, y Hungría, capitaneado por el iliberal Víktor Orbán, tumbaron la tipificación de la violación como eurodelito. Amnistía Internacional declaró por aquel entonces que se había perdido una oportunidad histórica para proteger a las mujeres de la violencia sexual y criticó que el reglamento era tibio en el respaldo de aquellos "grupos que corren mayor riesgo de violencia de género como los de las mujeres LBTQI, las mujeres en situación irregular y las mujeres que ejercen el trabajo sexual".

"El mensaje es muy claro. Europa no va a tolerar más la violencia contra las mujeres", proclama Helena Dalli

Aun con todo, la legislación se encuentra a la vanguardia en la lucha contra la violencia hacia las mujeres desde una óptica transversal. Penaliza la mutilación genital femenina, el matrimonio forzoso, tipifica por primera vez el acoso en la red o el intercambio no consentido de imágenes privadas como eurodelito –aunque es necesario probar daños tangibles–. También facilita el acceso a la justicia, promueve campañas de prevención y garantiza una mayor protección a las víctimas. "El mensaje es muy claro. Europa no va a tolerar más la violencia contra las mujeres. Esta directiva introduce importantes cambios a nivel sociocultural", ha proclamado Helena Dalli, comisaria de Igualdad, en la que es la última sesión plenaria de este mandato.

La medida, que se votará el miércoles, genera un grueso consenso a lo largo del arco parlamentario y cuenta con el apoyo mayoritario del Partido Popular Europeo, los Socialdemócratas, Liberales, Verdes y la Izquierda. "Damos un paso histórico para hacer de Europa el primer continente del mundo en eliminar la violencia contra las mujeres. Enviamos un mensaje de que no se acepta que por ser mujer corramos más riesgos que si fuéramos un hombre", ha apuntado Rosa Estarás, eurodiputado del Partido Popular. "No se puede alcanzar la igualdad si no se erradica la violencia de género. Por desgracia sigue existiendo esa creencia subyacente de que las mujeres son inferiores", ha coincidido su compañera de filas irlandesa, Frances Fitzerald.

"Cada 7 minutos hay una violación en la UE. 100.000 al año", denuncia Manon Aubry

Los europarlamentarios han dibujado, a través de las cifras, la radiografía de la lacra que deja la desigualdad y la violencia contra las mujeres en territorio europeo. Así, 50 mujeres y niñas son asesinadas cada semana. Una de cada tres han sufrido violencia física o sexual en algún momento de su vida. Solo el 0,5% de las violaciones acaban en condena. El 38% de los asesinatos a mujeres se producen a manos de sus compañeros sentimentales. El 73% de las mujeres periodistas han sufrido acoso en la red por su trabajo. Y todo ello tiene además un coste económico de unos 366.000 millones de euros. "Cada 7 minutos hay una violación en la UE. 100.000 al año. Se condenan cada año a menos del 1% de los violadores. ¿Qué se diría si se condenas menos del 1% de los robos, por ejemplo? Sería un escándalo y estaría en todos los titulares de prensa. Pero cuando se trata de derechos de la mujer siempre es diferente", ha denunciado Manon Aubry, eurodiputada de Francia Insumisa.

Por su parte, Diana Riba, de Los Verdes, ha celebrado que se dé paso a a una Europa "donde las mujeres puedan vivir sin miedo, donde no tengamos que llamar a nuestras amigas para que nos acompañen con su voz cuando andan solas por la noche, donde no tengamos que agarrar con fuerza y rabia las llaves en el bolsillo y donde ninguna mujer tema nunca más a entrar en su casa porque su casa no es su hogar, es su infierno".

Reforma contra la trata de personas

Pero la medida genera rechazo en algunas delegaciones progresistas. La italiana socialdemócrata Pina Picierno ha dejado constancia de que votará en contra. "Es una oportunidad perdida" que deja un texto "descafeinado" por la "miopía y la arrogancia de los gobiernos". "¿Cómo se lo vamos a explicar a las mujeres? ¿Con qué caras les vamos a pedir que denuncien si aquí estamos reforzando los principios patriarcales? No en mi nombre", ha espetado. En el otro lado, la extrema derecha de Vox o el partido de Marine Le Pen ha cargado contra lo que califica de una iniciativa cargada de "ideología de género", incertidumbre jurídica o violencia producto de "inmigración descontrolada".

En paralelo, el Parlamento Europeo aprobó el martes por 563 votos a favor, 17 abstenciones y solo 7 en contra la reforma de la Directiva relativa a la prevención y lucha contra la trata de seres humanos. "Se contempla por primera vez la explotación reproductiva, se protege y se asiste a las víctimas, se criminaliza la demanda y se suspenden permisos y autorizaciones para quienes participen en este negocio", ha celebrado Palop. El texto introduce la explotación en la gestación subrogada, pone el foco en la dimensión online, establece mecanismos de asistencia y apoyo a nivel nacional, así como recopilación de datos. "Que tomen nota los prostíbulos en los que no se cumpla con la legalidad. Buena parte de ellos son agujeros negros en los que no se distinguen unos servicios sexuales de otros, ni quién los presta, ni en qué condiciones", ha advertido la eurodiputada.

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