El jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, prevé realizar en las próximas semanas el viaje oficial a China que tuvo que aplazar hace un año y durante el que se entrevistará con los máximos dirigentes de este país asiático, entre ellos su presidente, Xi Jinping. A la espera de la confirmación oficial de este viaje, fuentes diplomáticas han informado de que es previsible que se realice en la última semana de septiembre, aunque en Moncloa se subraya que aún no están cerradas las conversaciones con China respecto a la fecha de ese desplazamiento.

El Ejecutivo estaba muy interesado en esta visita oficial que pretende reforzar las relaciones políticas bilaterales y especialmente las de carácter económico con un país en constante crecimiento como China.

España y China habían cerrado hace un año la visita de Rajoy a Pekín, pero se pospuso debido a motivos de agenda del presidente chino que impedían que pudiera entrevistarse con el jefe del Ejecutivo. Desde entonces, el Gobierno ha dado por hecho que esa visita se iba a realizar con independencia de cuestiones judiciales en España que afectaban a dirigentes chinos.

La Audiencia Nacional había dictado órdenes internacionales de detención contra el expresidente de China Jiang Zemin y otros cuatro exdirigentes de este país dentro de la causa en la que investigaba la represión sobre los habitantes del Tibet. Una decisión ante la que el Gobierno chino mostró de inmediato su 'fuerte malestar'.

Tras la reforma de la Ley de Justicia Universal, el pleno de la Audiencia Nacional archivó en junio pasado la causa del presunto genocidio en el Tíbet, así como la abierta sobre la persecución a los seguidores del grupo Falun Gong en ese país porque, tras la modificación realizada, no se cumplían los requisitos para investigar estos casos en España. El Gobierno pretende un 'completo' viaje de Rajoy a China durante el que se entrevistaría, además de con el presidente del país, con su primer ministro, Li Keqiang. Además, protagonizaría algún acto de marcado carácter económico y, previsiblemente, mantendría un encuentro con la colectividad española en Pekín.

En el terreno comercial, el secretario de Estado de Comercio, Jaime García Legaz, viajó en julio a China para entrevistarse con el viceministro de este área, Zhong Shan, con el objetivo de impulsar las exportaciones españolas al gigante asiático y al mismo tiempo facilitar la llegada de mayores inversiones chinas. Esa visita fue la primera de un alto cargo español tras el archivo de la causa que estaba abierta en la Audiencia Nacional. García-Legaz negó entonces que ese caso haya afectado a las relaciones comerciales.

Entre enero y abril de este año, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), las exportaciones españolas a China descendieron un 0,9% y las importaciones aumentaron un 8,6% con respecto al mismo periodo del año anterior, lo que ahonda en el desequilibrio de la balanza bilateral, ya que España exporta a China cuatro veces menos de lo que importa.