El fotógrafo asturiano Manu Brabo llega este viernes a Madrid, después de que la Policía del dictador libio Muamar Gadafi le arrestara hace mes y medio. Está previsto que su vuelo aterrice a las 12.30 horas en Barajas y que dé una rueda de prensa en la sala del aeropuerto.

Allí estarán esperándole sus padres, que se han desplazado desde Gijón para reunirse con él. Brabo llegó ayer a Túnez después de atravesar en coche la frontera con Libia. En la capital tunecina fue acogido por el personal de la embajada  será el propio embajador, Antonio Cosano, el que vuele con él hasta Madrid.

Brabo fue puesto en libertad el pasado miércoles en Trípoli junto con otros tres periodistas extranjeros, Nigel Chandler, James Folley y Clare Morgana Gillis, que como él habían sido condenados a un año de prisión, eludible por no tener antecedentes, y a una multa económica de unos 100 euros.

Al igual que sus compañeros, Brabo fue detenido a comienzos de abril en la carretera entre Brega y Ajdabiya, en la zona oriental de Libia, país al que llegó a mediados de marzo para cubrir el frente de combate como colaborador de la European Pressphoto Agency

Tras la liberación de Brabo, Chandler, Folley y Gillis se ha conocido que otro fotógrafo que viajaba con ellos cuando los detuvieron, fue asesinado por las tropas de Gadafi. Se trata del suráfricano, Anton Hammerl, al que se daba por desaparecido.

Según recoge el diario The Star, para el que trabajaba Hammerl, Bravo, Foley y Chandler estaban con él cuando resultó herido en el abdomen cerca de Brega el 5 de abril. Sus heridas eran tan graves que no había esperanza alguna de que sobreviviera sin atención médica inmediata y finalmente falleció.