Efectivos de la Policía y Fiscalía ecuatorianas allanaron este viernes las oficinas de una ONG que dirige el informático sueco Ola Bini, amigo del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, quien afronta un juicio por presunto acceso ilegal a sistemas informáticos en Ecuador.

El abogado de Bini, Carlos Soria, manifestó a Efe que en un primer momento el allanamiento se practicó sin presencia de asistencia letrada. Sin embargo, posteriormente fue el propio abogado quien acompañó la diligencia judicial en el Centro de Autonomía Digital (CAD), situado en Quito.

Tras la diligencia, Soria sostuvo que se habían cometido varias irregularidades en el procedimiento y que en principio la orden de allanamiento no tenía la firma de un juez de garantías penales.

Asimismo, indicó que el escrito a él presentado al inicio de la diligencia por los agentes no contenía la orden de incautación de los equipos informáticos de la ONG y que fue entonces cuando solicitaron "un alcance" para que se les permita llevar los ordenadores y otros materiales.

Soria hizo un "llamado de auxilio" porque, según dijo, "nuevamente se están violando los derechos" de ecuatorianos y del ciudadano sueco. "Esto será probado nuevamente y también será denunciado a organizaciones nacionales e internacionales", agregó Soria tras señalar que, a su criterio, la acción parecería ser realizada por "un Estado persecutor". La defensa de Bini analiza al momento las acciones que ejecutará tras lo que consideró como parte de una "brutal persecución" contra su defendido.

Por su parte, la Fiscalía General del Estado indicó que el procedimiento se realizó con el apoyo de la Policía y que se inscribe en una instrucción fiscal por "un presunto fraude procesal", con el fin de "recabar indicios". La intervención fiscal se produjo a días de que se cumplan tres años del arresto de Bini.

El sueco enfrenta una investigación por presuntamente haber intentado acceder a información de las plataformas de la petrolera estatal, Petroecuador, y de una oficina estatal de Inteligencia.

Bini, de 39 años, fue arrestado el 11 de abril de 2019 cuando se disponía a abandonar Quito con destino a Japón, unas horas después de que el Gobierno de Ecuador, presidido entonces por Lenín Moreno (2007-2021), pusiera fin al asilo en su embajada en Londres de Julian Assange.

Según la Fiscalía, Bini habría accedido sin autorización al sistema de la Corporación Nacional de Telecomunicaciones con el objetivo de intentar obtener información del contenido digital de las plataformas de la petrolera Petroecuador y de la antigua Secretaría Nacional de Inteligencia.

Este caso debió haber sido procesado en 2019, pero fue pospuesto en varias ocasiones por diferentes motivos, incluido los generados por la pandemia del coronavirus.

Tras dilaciones que su defensa considera injustificadas, el juicio contra Bini se inició en enero pasado y hasta la fecha no han trascendido detalles sobre los avances del proceso.