El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha advertido este lunes de que la respuesta de su país hacia el grupo chií libanés Hizbulá por los ataques perpetrados el sábado en una aldea de los Altos del Golán "llegará y será dura". Al menos 12 niños y adolescentes de entre diez y 20 años murieron en un ataque en un campo de fútbol en este territorio ocupado y controlado por Israel en la frontera libanesa.

Además, alrededor de 30 personas resultaron heridas, seis de ellas en estado grave, a causa del proyectil lanzado desde el Líbano. La milicia ha negado cualquier implicación y ha atribuido lo ocurrido a un proyectil antiaéreo de intercepción israelí. Sin embargo, Netanyahu ha respondido mostrando fotos de esquirlas del cohete que, según sostiene, demuestran que es un Falaq-1 de fabricación iraní utilizado por el grupo.

Se trata de la ofensiva más mortífera en la región desde que se intensificaron las tensiones entre Israel e Hizbulá a través de la frontera, según ha comunicado recientemente la cadena BBC. En las últimas semanas se ha podido ver como el grupo chií, aliado de Irán, ha atacado posiciones al otro lado de la línea divisoria con cohetes y drones en solidaridad con las milicias palestinas, mientras Israel ha respondido desproporcionadamente con bombardeos a objetivos militares del grupo en el Líbano y en Siria.

Dado el creciente aumento de las hostilidades entre esta milicia y el Ejército israelí, varias aerolíneas han suspendido sus vuelos desde y hacia Beirut, y países como Noruega, Francia o Bélgica han pedido a sus ciudadanos que abandonen el Líbano ante la posibilidad de que la situación se tense mucho más. 

Tras el ataque, el gabinete de seguridad de Israel, que reúne a la cúpula militar y de inteligencia junto a ministros de carteras importantes, autorizó recientemente a Netanyahu y a su ministro de Defensa, Yoav Gallant, a decidir una respuesta contra Hizbulá. En el encuentro se abordó igualmente la situación de la negociación para la liberación de los rehenes retenidos en la Franja de Gaza, según el periódico hebreoYedioth Aharonoth.