BANGKOK.— Un tribunal de Tailandia empezó este lunes a juzgar al español Artur Segarra, único acusado del secuestro, robo y asesinato de su compatriota David Bernat, cuyo cadáver apareció el pasado enero desmembrado en Bangkok. 

Segarra reiteró hoy su inocencia sobre los trece cargos que la fiscalía tailandesa le imputa y solicitó revisar las pruebas en su contra.

En una vista previa al juicio oral, que duró aproximadamente una hora y media, la fiscalía entregó documentos y una lista de 95 testigos que sostienen la acusación para que los magistrados los validen.

Segarra, ayudado por una traductora, volvió a afirmar su inocencia, como hiciera el pasado mayo en esa misma sala, y solicitó, en esta ocasión, una copia de las pruebas en su contra.

El juez accedió a la petición y estableció una nueva vista el próximo 25 de julio.

Las diligencias policiales apuntan a Segarra como el único autor de un total de trece delitos perpetrados durante el rapto y la posterior muerte de David Bernat.

Secuestro, robo, extorsión, falsificación de documentos y destrucción de pruebas, entre otros, son crímenes que se suman al asesinato y posterior descuartizamiento del consultor español, por los cuales Segarra se enfrenta a la pena de muerte.

Según las últimas pesquisas policiales, los equipos de investigación hallaron rastros de sangre de Bernat en una cañería del piso que Segarra tenía alquilado en la capital tailandesa, donde se realizó el asesinato conforme a lo expuesto por las autoridades.

La Policía también cuenta con numerosas imágenes donde se ven juntos a Segarra y Bernat, antes de la desaparición del segundo, así como capturas de vídeo del sospechoso comprando el material con el que supuestamente realizó el crimen y retirando el dinero sustraído a la víctima en varios cajeros de la metrópoli.

Restos sin vida de Bernat aparecieron en diversos tramos del río Chao Phraya, que cruza Bangkok, unos diez días después de que el 20 de enero llegara a la capital tailandesa procedente de Irán, donde habitualmente residía y realizaba negocios.

Segarra fue detenido el 7 de febrero en la ciudad camboyana de Sihanukville, adonde había huido dos días antes, y fue entregado un día después a las autoridades tailandesas.