El enviado especial de la presidencia de Argelia para el Sáhara Occidental y los países del Magreb, Amar Belani, ha señalado este miércoles que espera "aclaraciones francas" de España. Argelia ha reclamado estas explicaciones "para reconstruir una confianza gravemente dañada" tras el giro político que anunció el Ejecutivo de Pedro Sánchez sobre el Sáhara al apoyar la propuesta marroquí como autonomía.

Belani ha indicado a la agencia de noticias oficial argelina APS que "el regreso" del embajador de Argelia, Said Musi, a Madrid será "decidido soberanamente por las autoridades argelinas en el marco de aclaraciones previas y francas para reconstruir una confianza gravemente dañada". Hace un mes, el país argelino llamó a consultas a su embajador en Madrid, también retirado de la capital como protesta por el apoyo del Gobierno a Marruecos en el Sáhara.

El enviado especial también ha apuntado este miércoles que quienes "ingenuamente especulan con un enfado temporal de Argelia, no están en sintonía con la realidad". Por su parte, España ha defendido la alianza estratégica que mantiene con su socio argelino, sobre todo, en materia energética por su mayoritaria exportación del gas.

Belani ha sostenido que la "nueva posición" del Ejecutivo de Pedro Sánchez sobre el Sáhara dio a entender que "parece que España ha olvidado que tiene una responsabilidad particular, moral y jurídica". A lo que añadió que sus declaraciones fueron formuladas "con desconcertante ligereza, que corresponden al deseo de absolverse de la pesada responsabilidad personal en la adopción de este sorprendente vuelco".

El movimiento independentista saharaui, también conocido como el Frente Polisario, suspendió el pasado 10 de abril sus contactos con el Gobierno de España tras el apoyo de Sánchez a lo que el enviado especial ha calificado como "ilegal propuesta del ocupante marroquí". Una cuestión que ha causado el distanciamiento del socio del Ejecutivo de Sánchez, el cual ha consolidado estos últimos días un nuevo acercamiento a Italia como próximo socio estratégico en Europa en respuesta a los "cálculos estrechos y egoístas" de España.  

Desde el Ejecutivo de Sánchez siguen defendiendo que el plan de autonomía para el Sáhara Occidental que Marruecos promueve desde el 2001 es "la base más seria, realista y creíble" para la "resolución" del conflicto.

El presidente del Gobierno reafirmó en Rabat, en su encuentro con el rey Mohamed VI de Marruecos, el respaldo de España al plan de autonomía que ha provocado las discrepancias de su socio argelino y principal defensor del Frente Polisario, que reclama la independencia del Sáhara.