El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, no mueve ni una ficha en su tablero estratégico sobre Euskadi para hacer frente a la izquierda abertzale y ETA: 'No está en condiciones de convencer a ETA de que lo deje y están casi genéticamente incapacitados para apartarse de la banda'.

Rubalcaba mantuvo así el mismo discurso que siempre el día en que la izquierda abertzale y EA rubricaban su pacto para avanzar hacia la construcción de un Estado vasco por vías 'pacíficas y democráticas'. Tampoco cambió el gesto al conocer la declaración de Alsasua, en noviembre, ni al leer la resolución política aprobada por la izquierda abertzale, en febrero. El ministro del Interior sigue en sus trece, y parece poco dispuesto a cambiar las piezas de su tablero, aunque se lo pida el propio Jesús Eguiguren, presidente de los socialistas vascos y representante del Gobierno en el anterior proceso de paz.

El ministro insiste en que 'lo que hay que hacer ahora es apretar a Batasuna'

Rubalcaba dijo, en declaraciones a la cadena SER, que 'lo que hay que hacer ahora es apretar. A Batasuna hay que pedirle pruebas'. 'Las cosas van más despacio de lo que se cree', dijo, en alusión a Eguiguren: 'El proceso en Euskadi está más verde de lo que se dice'.

El presidente del Partido Socialista de Euskadi estaba al otro lado del teléfono en el mismo programa radiofónico, convencido de que el diagnóstico que daba Rubalcaba no es exacto. Eguiguren mostró su 'seguridad absoluta' en que ha habido 'un cambio radical en el sentimiento de la gente de Batasuna'. 'Han llegado a la conclusión de que es incompatible votos y armas', dijo.

El presidente del PSE ya predijo en 2009 que iba a haber cambios

El presidente del PSE insistió así en las tesis del documento conocido el pasado viernes, en el que reclamaba al lehendakari que lidere la nueva situación y planteaba la posibilidad de favorecer el proceso con medidas para la legalización de la izquierda abertzale y los presos de ETA. 'No basta con que acabemos con el terrorismo o ETA se disuelva. Luego tenemos que ir cerrando todas las heridas que se han creado en este país, hacer irreversible la vuelta al terrorismo', añadió. Preguntado sobre las críticas recibidas por la 'inoportunidad' de su documento, respondió que 'ahora es el momento de hacerlo', convencido de que si no, 'los acontecimientos nos van a rebasar'. Eguiguren también replicó a la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, que había pedido su cese. '¿Para qué quiere mi cabeza?', se preguntó.

El presidente del PSE, que en ningún momento cuestiona en su documento la política antiterrorista seguida hasta ahora, vuelve a estar en el centro de las críticas del PP y es, incluso, cuestionado públicamente por compañeros de partido y por el consejero vasco de Interior, Rodolfo Ares.

Mientras tanto, las predicciones sobre Batasuna hechas hace más de un año por Eguiguren ya han comenzado a cumplirse.