Mariano Rajoy dio ayer públicamente su bendición a la ruptura del PP con sus socios de Gobierno en Canarias. 'Si los diputados de Coalición Canaria (CC) se quieren dejar engañar es su problema, pero hay otros que no se dejan engañar y por eso han tomado la decisión que han tomado', proclamó durante una comparecencia en el Congreso de los Diputados tras la aprobación de los Presupuestos.

El líder del PP dijo que lo que tenían que haberle pedido los nacionalistas canarios a José Luis Rodríguez Zapatero es que 'cumpla los acuerdos del Consejo de Ministros que se celebró en Las Palmas y en el que anunció 2.500 millones de euros de inversión cada año, durante una década, y que ha incumplido absolutamente'. Se refería al denominado Plan Canarias.

Soria (PP) señala que no ha hablado con Rivero de 'apoyo externo'

'Ha engañado a la gente', insistió Rajoy para explicar las razones que le han llevado a perder un Gobierno en 24 horas, el tiempo que transcurrió entre la foto del presidente de Canarias, Paulino Rivero, con el jefe del Ejecutivo socialista en la Moncloa y la fractura.

Los conservadores están indignados no sólo por el apoyo de la formación nacionalista a las cuentas generales del Estado sino también por haber rubricado un pacto de estabilidad que garantiza la continuidad de Zapatero hasta 2012. Por eso la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, defendió ayer la 'coherencia' de su partido.

Los cuatro consejeros del PP abandonarán hoy sus cargos

'Los Presupuestos no conllevan ningún beneficio para la creación de empleo y riqueza en Canarias y estamos muy tranquilos porque el PP canario ha sido muy coherente', señaló Cospedal. También anunció que su partido dará estabilidad a Rivero apoyando las cuentas autonómicas y 'aquellas medidas que formen parte del pacto' que firmaron en su día juntos.

El líder del PP de Canarias, José Manuel Soria, dio más datos al respecto. 'No hemos hablado de apoyo externo', comentó tras una reunión con Rivero. El dirigente conservador resumió que, a partir de ahora, los conservadores en las islas seguirán apoyando desde la oposición lo que han venido respaldando hasta ahora. 'No vamos a caer en la incongruencia', sostuvo. Y los temas que no se han tratado serán analizados 'uno por uno'. 'La estabilidad es esencial', apuntó a pesar de que ha sido él quien ha dejado al Gobierno tambaleándose.

Finalmente será hoy, después de que se apruebe el anteproyecto de ley de Presupuestos en el Consejo de Gobierno, cuando dimitan los cuatro consejeros del PP. La reunión se ha adelantado un día.

El presidente del Gobierno canario, Paulino Rivero, que ha renunciado a echarlos inmediatamente como algunos le pedían desde su filas, admitió ayer que respetaba la decisión del PP pero que no la comparte porque ha 'antepuesto el interés de partido a la defensa de Canarias'.

'He defendido, defiendo y defenderé con firmeza y orgullo el interés de los canarios', añadió. En rueda de prensa, el presidente de la comunidad canaria, que agotará la legislatura, afirmó que 'las decisiones que afecten a los cambios de gobierno' las adoptará 'en las próximas 72 horas con serenidad, tranquilidad y responsabilidad'. 'No son tiempos para improvisaciones ni sobresaltos. Hay que generar certidumbre, confianza y tranquilidad', indicó.

Además, reconoció que le habían llamado el martes por la tarde Zapatero y el vicesecretario general del PSOE, José Blanco, para expresarle 'la consideración del Gobierno de España y la puesta en disposición de los socialistas canarios para los apoyos que necesite el Gobierno de Canarias'.