Pachi Vázquez ha resultado este sábado reelegido secretario general del PSdeG, por un 53% de los votos, un total de 245 frente a los 212 de la otra candidata, la exministra Elena Espinosa. En total se han emitido 460 votos, de los que hubo uno nulo y dos en blanco, en las votaciones que terminaron hace más de media hora en el XII Congreso del partido.

La votación, que se ha iniciado a las ocho de la tarde, duró una hora, tras lo que se procedió al recuento de las cuatro urnas, tras lo que el plenario del congreso proclamará como líder del PSdeG a Vázquez, quien tendrá una intervención ya como nuevo secretario general y mañana dará a conocer oficialmente su Ejecutiva.

El éxito de este licenciado en Medicina, pero político de profesión, en el XII Congreso del PSdeG ha sido doble. Y es que no sólo ha logrado mantener la dirección del partido que asumió hace casi tres años, sino que este resultado le permite deshacerse de las tutelas que siempre han planeado sobre sus decisiones.

Lograr el respaldo de la mayoría de los compromisarios con derecho a voto en este cónclave supone para este ourensano de 57 años que ha sido 'casi todo' en política, dotarse de autoridad para ejercer su liderazgo y para situar a sus más fieles en un equipo de dirección en el que de antemano ha advertido de que no tolerará la deslealtad.

Además, su promesa en esta campaña de construir el partido 'de abajo a arriba', le ha ayudado a desembarazarse del sambenito de candidato oficial con que se alzó secretario general en 2009, sobre todo, por contraposición con su oponente, Elena Espinosa, que se presentó flanqueada por los principales pesos políticos e institucionales del PSdeG.

Precisamente, en su última intervención como candidato ante el congreso, ya dejó claro que liderará un partido 'sin ningún tipo de tutela'. 'No quiero un proyecto con liderazgos paternalistas que me vengan a decir lo que tengo que hacer', sentenció Vázquez, en presencia del exvicesecretario general del PSOE José Blanco.

El propio Blanco ha asegurado tras darse a conocer los resultados de la votación que que su 'preferencia personal' en este congreso era Elena Espinosa. En todo caso, ha expresado su 'satisfacción' por la 'democracia interna' de su partido.

Tras superar esta reválida, el de O Carballiño tendrá que someterse pronto a un nuevo examen: el de las primarias que ha prometido convocar para que la militancia elija al candidato a la Presidencia de la Xunta que considere idóneo en unas elecciones autonómicas que, en principio, se celebrarán dentro de un año.

En unos meses tendrá que decidir entre su ambición por convertirse en el sexto presidente de la Xunta, y plantar cara a Alberto Núñez Feijóo poniendo en riesgo el puesto ahora logrado en caso de no alcanzar Monte Pío, o limitarse a mantener las riendas del PSdeG dejando que otros den la batalla y recojan los frutos de la labor de oposición que ha realizado desde abril de 2009.