A partir del próximo sábado, los indignados de Madrid tendrán su propio medio de comunicación en papel, un periódico al que han llamado Madrid 15-M. Hace dos meses, varias asambleas secundaron la iniciativa de lanzar un rotativo, surgida de los vecinos de Villaverde, un barrio obrero del sur de la capital.

Un mes después, un grupo de trabajo en el que participan de forma habitual unas 15 personas comenzó a encargarse de dar forma a un proyecto que pretende 'favorecer la cohesión interna' y contribuir a 'poner cara' al movimiento entre la ciudadanía. Asimismo, sus creadores aseguran que el objetivo es también 'presentar un reflejo fiel del movimiento madrileño, alejado de la imagen estereotipada que ofrecen los medios de comunicación convencionales'.

A excepción del número cero, el periódico no tendrá editorial porque, según defienden sus promotores en una nota de prensa, 'nadie puede hablar por el movimiento excep-to el propio 15-M a través de sus asambleas'. Tampoco habrá un equipo directivo o jefes de las diferentes secciones. De hecho, el grupo de trabajo encargado de su realización será 'rotativo'. Además, los indignados insisten en que no podrán participar en la redacción de artículos las personas que ocupen 'cargos de responsabilidad en partidos políticos, sindicatos o medios de comunicación comerciales'.

Roberto Blanco, uno de los integrantes del grupo de trabajo que elabora el periódico, asegura que se trata de un proyecto autogestionado. Sus promotores pensaban contar con la ayuda de una ONG para hacer frente a los primeros costes de impresión que, según puede observarse en las cuentas que pueden consultarse en internet, alcanzan los 1.720 euros. Sin embargo, según cuenta Roberto, estos gastos serán finalmente sufragados con las aportaciones personales de miembros del movimiento a través de bonos de 5 euros.

Los integrantes del grupo insisten en que el rotativo será de difusión gratuita y la venta de estos bonos 'sólo servirá para pagar la imprenta y otros gastos que se generen', ya que ninguna de las personas que lo elaboran recibirá contraprestación económica alguna.

La publicación será gratuita y tendrá, por el momento, 16 páginas a color. La primera tirada será de 20.000 ejemplares y su difusión se llevará a cabo principalmente a través de las asambleas.

Entre los contenidos de este número cero habrá textos sobre los recortes y la inminente reforma laboral, reportajes sobre las Brigadas de Observación de Derechos Humanos, el 'desmantelamiento' de la sanidad pública catalana, los desahucios y sobre cómo trabajan las asambleas, así como artículos de opinión de Carlos Taibo y Félix Rodrigo Mora.