Más de un centenar de personas se han congregado bajo la sede de Bankia en Madrid para denunciar las ayudas públicas de más de 23.000 millones de euros a la entidad financiera.

Tal y como estaba previsto, la cacerolada ha comenzado a las 17.00 horas frente a las Torres KIO. Los manifestantes, convocados a través de las redes sociales, han denunciado la 'estafa' de la solicitud de la entidad.

'Estamos aquí para pedir justicia y para que se acabe con los robos. Esto es un robo sin armas, premeditado y con organización', ha señalado uno de los manifestantes que han pedido a los coches que circulaban por el Paseo de la Castellana que tocaran el claxon en señal de protesta.

Otra de las quejas más repetidas entre los concentrados ha sido la de los ajustes que el Gobierno está realizando en ámbitos como la sanidad y la educación, en contraste con el dinero que será necesario para sanear las cuentas de Bankia. También han reclamado la depuración de responsabilidades para los gestores de la entidad, ante la negativa del Gobierno de desarrollar un comité de investigación en el Parlamento.

Por otra parte, algunos de los asistentes, que aseguraban ser accionistas, han denunciado que la entidad sólo proporcionaba información sobre las ganancias y 'nunca sobre el agujero que tenía escondido'. La protesta, que ha durado cerca de dos horas, ha sido vigilada por cuatro furgones de la unidad de antidisturbios de la Policía Nacional, que también protegía la entrada al edificio.

Los hashtag #Bankiaeslabestia, # OcuppyBankia y #OcuppyMordor han servido de enlace entre los comentarios de los manifestantes, que han comentado la cacerolada desde la red social de Twitter, donde se anuncia que mañana se realizará otra en el barrio madrileño de Lavapiés, a las 12.00 horas. En Sevilla y Barcelona también se han realizado concentraciones.