El fin de semana del 21 y 22 de mayo murieron diez personas en las carreteras españolas. Cinco de ellas, motoristas. Justo dos meses antes, en el tercer fin de semana de marzo, nueve de las 15 personas que se dejaron la vida en el asfalto conducían una motocicleta. Así como las víctimas mortales en siniestros de coche disminuyen mes a mes con respecto al año anterior (por ahora un 9,5%), esa tendencia a la baja no se aprecia en los accidentes de moto. De hecho, entre 2003 y 2009 el descenso de víctimas mortales de tráfico fue del 50%. Sin embargo, en el caso de las motos se produjo un incremento del 22% en carretera y del 12% en zona urbana.

2007 fue el peor año para los motoristas, con 425 muertos en carretera. La Dirección General de Tráfico (DGT) elaboró un plan para este colectivo y consiguió reducir la siniestralidad casi en un 40%. Las cifras, sin embargo, han vuelto a dar un giro. Aunque el parque de motos aumentó un 3,9% en 2010, hasta el mes de abril, 62 motoristas murieron en las carreteras, 14 más que en el mismo periodo del año pasado. A pesar de que la primavera de 2010 fue lluviosa y, por lo tanto, salieron menos motos que este año, la DGT señala el mal uso de las motocicletas de gran cilindrada como causa principal de los accidentes.

62 motoristas murieron hasta abril, 14 más que el año pasado

El 74% de los 438 motoristas muertos en 2009 conducía motos de más de 500 cc. 'Inclu-so en zona urbana, donde se registraron menos accidentes [123 fente a los 325 en carretera], las motos de gran cilindrada representan el 56% del total', advierte la directora del Observatorio de la Seguridad Vial, Anna Ferrer, que señala 'la importancia de la formación y el control de las potencias de las motos'.

Con ese objetivo, Tráfico relanzará este mes de junio una campaña divulgativa para promocionar los cursos de conducción segura. Se trata de un conjunto de técnicas orientadas a evitar accidentes de moto que 'preparan al conductor para solventar situaciones de peligro y evitando prácticas de riesgo', explica la DGT.

Tráfico cambiará el examen de motos de más de 500 cc por un curso formativo

El contenido de las clases está consensuado por un grupo de trabajo formado por representantes de la DGT, ayuntamientos, autoescuelas y asociaciones de motoristas. Los cursos, que empezaron el año pasado, los imparten la escuela TAC, Honda Instituto de Seguridad Vial y la Asociación Mutua Motera. De carácter voluntario, las clases combinan una parte teórica (de no menos de hora y media) con otra práctica (de un mínimo de cuatro horas) y cuestan entre 150 y 200 euros.

Los cursos están dirigidos a motoristas que hace tiempo que se sacaron el permiso y necesitan refrescar conceptos olvidados y a aquellos que salen sólo el fin de semana a la carretera. Mutua Motera advierte, sin embargo, de que 'los motoristas son responsables de los accidentes en sólo un 34%, según varios estudios'.

Otra apuesta de la DGT por la formación, en este caso centrada en las motos de alta cilindrada, que concentran la mayor siniestralidad, es la supresión del examen de acceso al permiso de motocicletas A. En su lugar, los conductores que ya tengan el carnet A2 deberán hacer un curso teórico-práctico de conducción segura si quieren conducir motos de más de 500 cc.

Mutua Motera: 'Son imprescindibles los guardarraíles seguros'

'La formación es clave para reducir los accidentes', coincide con la DGT el presidente de Mutua Motera, Juan Manuel Reyes, que añade que 'también es imprescindible la adecuación de las infraestructuras para los usuarios vulnerables'.

Los guardarraíles seguros para motoristas es la mayor reivindicación de este colectivo. Y más ahora, que el Plan de Barreras de Seguridad en la Red de Carreteras del Estado para 2008-2012 'se ha paralizado por culpa de la crisis', denuncia la asociación. 'Deberíamos tener 3.000 kilómetros de guardarraíles seguros y todavía no llegamos a 1.500', señala Reyes, que afirma: 'El 18% de los motoristas que mueren en un accidente lo hacen tras estrellarse contra un guardarrail'.

Mutua Motera asegura que el coste de la instalación de guardarraíles seguros representa el 0,5% del valor total de una carretera y que gracias a estos mecanismos se podrían evitar 150 muertes al año. El Ministerio de Fomento, sin embargo, negó que el plan de Barreras de Seguridad esté parado y señaló que 'en aquellos puntos que se consideran de mayor riesgo' se están instalando barre-ras seguras, mientras que los guardarraíles antiguos de carreteras ya existentes se están 'sustituyendo en la medida de las posibilidades'.