Unicaja Banco registró un beneficio neto de 260 millones de euros en el año 2022, lo que supone un incremento del 88,9% respecto al ejercicio 2021, según ha informado este martes.

En el cuarto trimestre, sin embargo, la entidad andaluza se anota una pérdida neta de 1 millón de euros, al aumentar las provisiones para insolvencias con el fin de prepararse para una posible debilidad económica. Concretamente, Unicaja dotó 50 millones de provisiones extraordinarias para hacer frente a ese escenario, un 50% más que en el mismo trimestre del año anterior.

La entidad, el quinto mayor del país por activos, ha explicado que el resultado anual se ha apoyado en el aumento de los ingresos ordinarios, con un crecimiento del margen de intereses del 2,9% y del 7,3% para los ingresos por comisiones netas, en la reducción de los gastos de administración, del 8,2%, tras materializarse las sinergias derivadas de los planes de reestructuración previstos, y en los menores saneamientos del crédito, con una reducción del 20,8%.

Para 2023, Unicaja prevé que el margen de intereses alcance un crecimiento porcentual elevado, equivalente a entre el 15% y el 20%.

La ratio de mora se mantiene estable, en el 3,5%, mientras que la inversión crediticia performing de particulares se incrementó un 1,8% hasta 34.491 millones de euros y la financiación hipotecaria creció el 1,7%, manteniendo un perfil de riesgo bajo.

Asimismo, la entidad ha asegurado que mantiene una sólida posición de solvencia. La ratio de capital de máxima calidad CET 1 fully loaded se situó al cierre del año en el 13% con un exceso de capital de 1.622 millones de euros sobre los requerimientos regulatorios.

El banco no observa deterioro en sus carteras crediticias

Los bancos europeos están empezando a beneficiarse de la subida de los tipos de interés, pero algunos están dotando mayores provisiones frente a insolvencias debido a la incertidumbre económica creada por la elevada inflación.

A este respecto, Unicaja Banco ha señalado que, pese a las provisiones adicionales realizadas en el cuarto trimestre, no observa un deterioro en sus carteras crediticias, ya que incluso se reducen sus préstamos dudosos.

En la presentación de resultados, los directivos de la entidad han explicado que, para calcular estas provisiones, el banco ha "estresado" sus modelos, se han incluido todas las carteras crediticias del banco y se ha realizado con una estimación de inflación del 10% para 2022 y del 8% para 2023, si bien finalmente la media del IPC cerró el año en el 8,4%.

No obstante, el banco ha defendido que "lo correcto" es mantener una posición de prudencia por los posibles deterioros económicos que repercutan sobre los ingresos disponibles y la capacidad de pago de los hogares como consecuencia de la elevada inflación. Sin embargo, Unicaja Banco ha descartado que, por el momento, se hayan producido deterioros en sus carteras.