El precio de la luz se dispara este mes de abril, alcanzando un coste atípico para esta época del año, caracterizada por las escasas variaciones de la oferta y la demanda, según recoge El Confidencial. El Operador del Mercado Ibérico de Electricidad (OMIE), que rige el mercado mayorista de la electricidad ('pool'), ha registrado una cuantía media de más de 64 euros por megavatio hora ('MWh). 

Esta subida supone el registro más alto de los últimos cinco años en abril, anotando un precio un 70% superior a la media de este mes. Comparándolo con datos del año pasado, la diferencia se incrementa: el precio de este abril es un 368% más caro respecto al de 2020, cuando, debido a la pandemia y al confinamiento, el coste de la luz cayó hasta situarse en unos 17 euros MWh.

El precio, en contraste con marzo de este año, es un 44% más elevado. Esta subida afectará a los consumidores ya que se reflejará en la tarifa regulada (PVPC), que varía cada hora de cada día dependiendo de la oferta y la demanda, además es supervisada por el Gobierno y está relacionada con el 'pool'. 

Algunos analistas, tal y como señala el diario mencionado, achacan esta subida anormal a la especulación que se está produciendo en el mercado con los derechos de CO2. Los inversores están comprando estos derechos para aprovechar el momento en el que el precio suba y, de esta forma, venderlos.  

El ministerio de transición ecológica define estos derechos como "un instrumento de mercado, mediante el que se crea un incentivo o desincentivo económico que persigue un beneficio medioambiental". La Unión Europea configuró esta herramienta para reducir las emisiones de CO2. Las empresas y los países tienen un límite de emisiones. 

En el caso de que sobrepasen ese volumen marcado deben comprar derechos de emisión a las compañías que sí consigan reducirlas. De este modo, las compañías que reduzcan sus emisiones se verán beneficiadas. Sin embargo, este mercado se está viendo afectado por la acción de los especuladores. De hecho, la cotización en este sector se ha triplicado en apenas un año.

La inflación se acelera al 2,2 %

Los precios subieron en abril un 2,2% en comparación con el mismo mes de 2020, un avance casi un punto superior al de marzo (1,3%) que dispara la inflación hasta cotas no vistas desde octubre de 2018 por el encarecimiento de la energía que, como se ha indicado anteriormente, se ha producido debido al confinamiento por la covid-19.

El indicador adelantado del índice de precios de consumo (IPC) publicado este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE) está muy influido por este encarecimiento de la electricidad, al que hay que sumar el mantenimiento de los precios de carburantes y combustibles, que en abril de 2020 bajaban en pleno confinamiento por la pandemia.

Si se confirma este dato, el próximo 14 de mayo, el encarecimiento de la energía intensificaría en abril el fuerte repunte de precios ya registrado marzo (1,3%), tras un 2020 de IPC negativo al que siguió un pequeño aumento en enero de 2021 (del 0,5 %, debido a la borrasca Filomena) y estabilidad en febrero (tasa del 0%).