La subida de los tipos de interés para frenar la inflación sigue aumentando el precio de la vivienda, que ya lleva 37 trimestres al alza. Los datos publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE) confirman que la vivienda nueva, entre abril y junio, elevó su precio un 3,6%, mientras que la vivienda usada registró un incremento del 2,9%. Con esta subida, pagar por una casa ya cuesta a estas alturas un 7,7% más que el año pasado.

Navarra, Cantabria, Andalucía y Canarias son las comunidades con mayores subidas respecto al año anterior, con incrementos del 5,6%, 4,7%, 4,5% y 4,5%. Por su parte, Murcia (1,4%), Extremadura (1,8%) y Castilla–La Mancha (2,0%), registraron las menores subidas anuales. En Catalunya, los precios subieron un 3,2% y en Madrid un 4,1%, que sigue siendo una de las comunidades más caras junto a Balears y Euskadi.

Los jóvenes en España no pueden independizarse

La subida del coste de la vivienda afecta especialmente a los jóvenes en España. Actualmente, la edad media para independizarse es de 30 años. Según el último barómetro a cierre de 2022 del Consejo de la Juventud, un 15,9% de jóvenes emancipados en nuestro país, la mitad que la media europea, que se sitúa en el 31,9%.

Además, los jóvenes se ven obligados a destinar un 83,7% de su sueldo al pago del alquiler si quieren vivir en solitario. El Consejo de la Juventud señala que una de cada cinco personas de menos de 30 años con un puesto de trabajo se encuentra en pobreza o riesgo de exclusión social, lo que complica más esta situación.

También se ven perjudicadas aquellas familias con ingresos bajos, que experimentan dificultades para poder pagar sus hipotecas, sobre todo en el caso de las letras variables.