¿Cuál será la mejor forma de asegurar que sea la cooperación global -en lugar de la competencia y la fragmentación regional- la que inspire este nuevo orden? ¿Cómo puede Europa "subir de nivel" a medida que emerge de la pandemia? ¿Cómo garantizar en el sector financiero la competencia, el impulso de la transición ecológica y la prestación de mejores servicios a empresas y personas? Estos son algunos de los muchos temas sobre los que destacados expertos españoles e internacionales mostraron ayer su opinión durante la XIV Conferencia Internacional de Banca, referencia mundial en el sector financiero, para buscar respuestas a las incertidumbres que planean en el mundo post Covid.
Esta cita, que organiza con gran éxito Banco Santander desde 2008, reunió a altas personalidades del mundo financiero, la política, las empresas o la tecnología. En torno a 1.000 personas siguieron el acto, que se celebró en un formato mixto (online y presencial).
"Las economías se han recuperado, quizá no con la rapidez que esperábamos, pero están creciendo..."
Ana Botín, presidenta ejecutiva de Banco Santander, fue la encargada de inaugurar el evento desde la sede corporativa del grupo, en la Ciudad Financiera de Boadilla del Monte (Madrid). "Las economías se han recuperado, quizá no con la rapidez que esperábamos, pero están creciendo. Estamos volviendo a la normalidad. Una normalidad más incierta, con más deuda, más inflación y problemas en las cadenas de suministro… pero estamos de vuelta", señaló Botín al comienzo de su intervención. "La Covid ha traído sufrimiento, pero también ha acelerado drásticamente la revolución digital, ha abierto la puerta a políticas económicas y sociales diferentes y nos ha impulsado en el camino hacia una sociedad digital".
Botín mostró su preocupación por las consecuencias del cambio climático: "La ciencia sugiere que salvo que hagamos algo rápido, el cambio podría ser irreversible. Ahora son los líderes mundiales quienes tienen que entender las consecuencias. Tendremos una oportunidad única en Glasgow. Quizá la última oportunidad de mantener vivos los compromisos establecidos en París en 2015: alcanzar cero emisiones netas en 2050". Destacó que el mundo financiero global se está movilizando para apoyar la transición a la economía verde y recordó los pasos que está dando Banco Santander para cumplir su compromiso de alcanzar las cero emisiones netas en 2050. "Somos líderes globales en financiación de renovables. Sólo desde 2020, los proyectos de renovables que hemos financiado han creado energía suficiente para abastecer una ciudad tres veces el tamaño de Londres", explicó.
La máxima ejecutiva del banco reclamó la necesidad de una planificación y marcos regulatorios a largo plazo para la transición a bajas emisiones de carbono, "incentivos y desincentivos regulatorios claros y coherentes"; de que los gobiernos creen redes de seguridad social para aquellos cuyos puestos de trabajo cambiarán o desaparecerán, y políticas que incentiven y ayuden a las empresas a crear los millones de nuevos puestos de trabajo que los sustituyan; de grandes empresas que estén dispuestas a tomar la iniciativa, a ser un ejemplo; y de bancos y mercados de capitales que puedan proporcionar la financiación que impulse esta transformación y el crecimiento que traerá consigo. "Para eso es fundamental una regulación global que permita financiar la gran transición", destacó.
La conferencia inaugural dio paso a la primera mesa bajo el título El desafío climático, compromiso y la COP26, en la que Ana Botín, Håkan Samuelsson (CEO de Volvo Cars), Theodor Weimer (CEO de Deutche Börse) y Bill Winter (CEO de Standard Chartered) compartieron su visión sobre la construcción de una economía alejada de las emisiones de carbono, las oportunidades que genera este nuevo modelo, el ritmo y la naturaleza de la transición y la necesidad de un nuevo pacto social global para que ninguna comunidad ni región se quede atrás en el camino hacia una economía y una sociedad más verdes.
Los desafíos que afronta Europa centraron el segundo debate, que contó con la participación de Danuta Hübner (miembro del parlamento europeo), Irene Tinagli (presidenta del comité de asuntos económicos y monetarios de la eurocámara) y Guntram Wollf (director del influyente think tanks Bruegel). Los altos niveles de deuda pública, la retirada de las medidas de apoyo por la Covid, las dificultades que podría plantear la creciente presión inflacionista o las oportunidades y los riesgos en materia de política y geopolítica fueron algunos de los temas que se plantearon en esta mesa.
En la Conferencia Internacional de Banca también hubo hueco para abordar el aumento de la brecha en materia de renta y bienestar que ha provocado la emergencia sanitaria y la necesidad de un consenso mundial para impulsar la dinámica de las economías emergentes en el que intervengan gobiernos, empresas, bancos y organismos multilaterales. O la importancia de gestionar de forma más robusta futuras pandemias y los retos que sigue presentando la Covid, en especial la mejora de la distribución de vacunas en los países en vías de desarrollo. Este último corrió a cargo del epidemiólogo Jeremy Farrar, director de Wellcome Trust, una organización benéfica global que tiene como objetivo financiar proyectos científicos para abordar los desafíos urgentes en materia de salud que afectan a la humanidad.
Los servicios financieros y las exigencias a las que tiene que hacer frente la banca fueron los protagonistas de la mesa en la que participaron José Antonio Álvarez (CEO Banco Santander), Burkhard Balz (miembro del comité ejecutivo del Bundesbank), Pablo Hernández de Cos (Gobernador del Banco de España) y Fernando Restoy (presidente del Instituto de Estabilidad Financiera del Banco de Pagos Internacionales). En este caso, el panel giró sobre los riesgos y las oportunidades que representa la aparición de nuevos competidores en el sector financiero y la importancia de garantizar unas condiciones de competencia equitativas.
Por último, el consejero financiero y director del departamento de mercados monetarios y de capital del FMI, Tobías Adrián, compartió su opinión sobre la estabilidad financiera, la inflación y la política monetaria en todo el mundo, los desafíos que plantean las divisas digitales y el potencial de los mercados de capitales para ayudar a impulsar una economía más sostenible. La clausura de la Conferencia Internacional de Banca 2021 corrió a cargo de Nadia Calviño, vicepresidenta y ministra de Economía y Digitalización del Gobierno de España.
Calviño explicó la importancia del crecimiento para salir con fuerza de la crisis y garantizar que la recuperación económica no es temporal. Además, hizo hincapié en las oportunidades que brinda la llegada de los fondos europeos para apoyar una recuperación sostenible, basada en la transición verde, la transformación digital, la cohesión territorial y social y la igualdad de género. "Tenemos un buen plan de recuperación, los recursos para que sea real y la determinación para beneficiarnos de esta singular oportunidad para construir un futuro mejor, así que hagámoslo juntos", señaló.
¿Te ha resultado interesante esta noticia?